Agremiados de la Sección 9 del Sindicato Independiente de Trabajadores de Salud (SINTS), advirtieron que continuarán con sus acciones de protesta ante la nula respuesta a sus demandas por parte de las autoridades estatales, quienes desde hace un mes “no escuchan y no dialogan”.
Los manifestantes quienes mantienen en su poder desde hace 25 días las oficinas centrales de esta dependencia ubicadas en la calle de J.P García, expusieron que han sido víctimas de acoso laboral, despidos injustificados además de otra serie de acciones que trasgreden sus garantías individuales.
De acuerdo a Genaro Villalobos Sánchez, representante de los sindicalizados al menos tres empleados fueron corridos del programa de Fortalecimiento a la Atención Médica (FAM) antes Caravanas de la Salud. Mayra Cohetero, Miguel Ángel Lara Rodríguez y Amancio Reinaga Mecinas fueron cesados sin que recibierán alguna explicación.
Ante ello, los empleados no sólo realizaron una huelga de hambre sino que también se desangraron; situación que puso en riesgo la salud de Mayra Cohetero a quien se le negó en un primer momento la atención médica en el Hospital Civil.
Pese a lo anterior, las autoridades estatales en especial el encargado de los Servicios de Salud de Oaxaca, Héctor González Hernández han mostrado cero intereses a las demandas de los empleados, quienes aseguraron que desde hace un año entregaron su pliego de demandas.
Entre sus peticiones, los empleados piden que se aclaren los recursos por arriba de los 55 millones de pesos que debieron ser ejecutados en el FAM en el 2015 y 25 millones más en el 2016 que la coordinadora del programa, Sonia Eréndira Ramírez Luna no ha justificado.
Villalobos Sánchez no descartó que las autoridades estatales pretenden la desaparición del sindicato que aglutina a por lo menos unos 158 trabajadores de salud.
Carina García/Libertad-Oaxaca.info