Diana Mendez
A más de medio año de las fuertes lluvias que dañaron la infraestructura del Hospital de la Niñez Oaxaqueña, la situación en el nosocomio continúa siendo crítica. Pese al tiempo transcurrido, no se ha reemplazado el transformador dañado, lo que ha provocado la cancelación de varios procedimientos médicos, afectando directamente a pacientes pediátricos.
Uno de los casos más recientes es el de Ian, un menor que tenía programada una broncoscopia, la cual fue suspendida debido a las fallas eléctricas. Su madre, visiblemente preocupada, lamentó el gasto adicional que implica tener que regresar desde su comunidad, además de los medicamentos que el hospital no cubre.
El personal médico y administrativo señala que esta situación se arrastra desde las inundaciones del año pasado. A pesar de las múltiples solicitudes, el transformador nunca fue reparado ni sustituido, lo que evidencia una grave omisión por parte de las autoridades correspondientes.
Ante esta situación, el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaría de Salud, Sección 35, realizó un recorrido de supervisión en el área de Imagenología del hospital, acompañado de autoridades de los Servicios de Salud de Oaxaca. Durante la visita se revisaron equipos fundamentales como el de fluoroscopía, arco en C, tomografía, UPS y el sistema de alimentación eléctrica.
“El objetivo es claro: exigir condiciones óptimas para el ejercicio profesional y, sobre todo, para garantizar el bienestar de las y los pacientes”, indicaron representantes del sindicato.
