El diputado Flavio Sosa Villavicencio condenó este jueves, desde la más alta tribuna del Estado, los hechos registrados este 1 de mayo en la Ciudad de Oaxaca durante la conmemoración del Día del Trabajo, “porque la entidad ya no aguanta más violencia”, y cuestionó si ¿hay alguna trampa al gobernador Gabino Cué Monteagudo al pretender disuadir una manifestación con armas letales?
Durante la sesión ordinaria de la Diputación Permanente de la LXI Legislatura, el Legislador de la fracción parlamentaria del Partido del Trabajo (PT), se pronunció porque el presidente municipal de Oaxaca de Juárez, Luis Ugartechea Begué, cese al Comisario General de Seguridad Pública y Vialidad, Cuauhtémoc Zúñiga Bonilla, para facilitar la investigación en torno a lo ocurrido.
Dijo que al Poder Legislativo le debe preocupar estos hechos, y demandó que el secretario de Seguridad Pública (SSP) del Gobierno del Estado, Marco Tulio López Escamilla, aclare quién autorizó llevar armas letales a esa manifestación y la ilícita detención de presuntos manifestantes realizada por civiles.
El legislador Sosa Villavicencio aclaró que no defiende a quienes cometieron los actos vandálicos; es más, exigió que se investigue quiénes fueron los autores materiales e intelectuales de los mismos y se proceda conforme a la ley.
Afirmó que él está contra toda forma de violencia e insistió que se investigue quiénes dispararon armas R 15, “porque hay experiencias de hace seis años y ahora sucede lo mismo, porque los policías estatales y municipales cometieron los mismos errores y excesos”.
“La policía debe disuadir, contener y prevenir, no disparar, torturar ni perseguir, pues está para hacer que se respete la ley, entonces por qué recurre a los excesos y detiene a menores de edad”, cuestionó.
Señaló que no hubo flagrancia, ni orden de aprehensión al momento de detener a manifestantes; “por ello, la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) debe iniciar una investigación por homicidio en grado de tentativa y privación de la libertad en contra de los mismos, y si hay inocentes que los liberen de inmediato”.
Encarcelado en el penal de máxima seguridad del país en El Altiplano, Estado de México, tras los disturbios del 2006 en la entidad, el diputado Sosa Villavicencio afirmó que “Oaxaca no aguanta más violencia, necesita reconciliación y caminar por los acuerdos y la buena relación entre organizaciones sociales y Gobierno estatal”.
Recordó que hace seis años se registró en Oaxaca “un poderoso movimiento social que fue un acontecimiento histórico, generado por una serie de condiciones políticas y sociales que los abusos policiacos desataron”.
Agregó: “Ese movimiento paralizó al Estado y hasta ahora mantiene a Oaxaca dividido, y el Gobierno emanado de la transición no ha sabido reconciliar a la entidad que está herida, lastimada, a lo cual se suma la imprudencia policiaca, los excesos y brutalidad, y esa situación es condenable”.
Exigió que se aclare quiénes fueron los civiles con equipo de radio que detuvieron a manifestantes, y apeló a la sensibilidad y sensatez de las declaraciones del Comisario General de Seguridad Pública y Vialidad del Ayuntamiento de Oaxaca de Juárez, para que no omita lo ocurrido el 1 de mayo, porque dice que la policía municipal intervino a petición de la Sección 22 del SNTE.
“Oaxaca ya no aguanta más violencia y requiere de la reconciliación, porque hay desempleo e inseguridad que necesitan ser combatidos”, insistió.
