Un total de 24 personas fueron asesinadas en un lapso de cuatro horas en Sinaloa, incluidas 16 calcinadas, las cuales fueron localizadas en dos vehículos abandonados en distintos puntos de Culiacán. Estadísticas de la procuraduría local revelan que se trata del día más violento del año.
Marco Antonio Higuera Gómez, primer fiscal del estado, señaló que alrededor de las 6 de la mañana, sobre la calle Culiacancito, entre Navolato y Primero de Mayo, en la colonia Rosales, fueron localizados 12 cuerpos en una camioneta Nissan que aún ardía en llamas.
El funcionario precisó que vecinos de ese sector escucharon una explosión, por lo que el Cuerpo de Bomberos acudió a sofocar las llamas. Al controlar el fuego fueron descubiertos los cuerpos apilados de 11 hombres y una mujer, los cuales estaban envueltos en plásticos y fueron cubiertos con cajas de madera.
Personal de Servicios Periciales informó que algunas víctimas tenían torniquetes en el cuello y una estaba decapitada.La camioneta en la que fueron abandonados los cadáveres tenía un reporte de robo en Guamúchil.
Diez minutos después se reportó que en bulevar Isidro Salas Barrón, entre Mutualismo e Ignacio Zaragoza, a espaldas del Walmart ubicado en el desarrollo urbano Tres Ríos, estaba incendiándose un vehículo.
Agentes de diferentes corporaciones locales que arribaron al lugar descubrieron cuatro cuerpos quemados en el interior de una camioneta Ford Ranger KinCap blanca. A unos metros fue localizada la cabeza de una víctima.
Por la tarde la fiscalía confirmó que entre los fallecidos se encontraban el comandante de la policía municipal de Angostura, Santos Cárdenas, y los agentes Rosario Bojórquez Hernández y Juan Carlos Mascorro Inzunza.
Los tres fueron privados de la libertad cuando estaban en servicio en la comunidad de Palmitas, perteneciente al municipio de Angostura.
También fueron identificados los hermanos Martín y Guadalupe Gómez Almanza y el esposo de ésta, Pedro Medina Aguilar, además de Eugenio Rojas Hernández, Pedro Medina Aguilar, Pedro Núñez Lizárraga y Herculano Burgos.
Estas personas también fueron plagiadas, al parecer por el mismo comando que privó de la libertad a los agentes, indicaron autoridades de la Policía Ministerial del estado. El resto de los cadáveres no ha sido identificado.
El procurador del estado detalló que los dos hechos resportados pueden ser obra del mismo grupo delictivo, por lo que elementos de la Policía Ministerial de Sinaloa recaban imágenes de las cámaras de vigilancia en las salidas de la ciudad.
Más víctimas
Más tarde fueron hallados cuatro cuerpos más en el municipio de Mocorito, en el norte de la comunidad de Pericos, en Calomato. Tampoco éstos fueron identificados.
En tanto, en la ciudad de Guamúchil, municipio de Salvador Alvarado, fueron ultimados a balazos dos hombres y una mujer.
Los occisos fueron son los hermanos Aida y Gónzalo García Higuera, de oficio comerciantes, y Miguel Galaviz Bernal, de 35 años, ganadero. Todos eran originarios del municipio de Sinaloa de Leyva. Por la tarde se reportó el deceso de una mujer que fue baleada el martes en el sector Centro de la capital.
Sobre los hechos, el gobernador Mario López Valdez aseguró que la ola violenta que sufre Culiacán es parte de la disputa por la plaza entre grupos delictivos.
Dijo que se tomarán las medidas necesarias para que no se siga recrudeciendo la violencia. Descartó por ahora concentrar en la capital a los grupos especiales de la Policía Ministerial, lo que implicaría descuidar las zonas donde operan, incluida Mazatlán y Los Mochis.
López Valdez externó que en la guerra que libran los grupos criminales no se puede descartar que se siga habiendo muertes de personas inocentes, que quedan en medio del fuego cruzado.
Agencias
