La hepatitis es una enfermedad inflamatoria que afecta al hígado, puede ser causada por infecciones (viral o bacteriana), inmunitaria (por autoanticuerpos, hepatitis autoinmune) o tóxica (consumo de alcohol, venenos o fármacos), informó el jefe de la unidad de Salud Pública, de los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO), Reynaldo Miguel Zavaleta.
En el marco de celebración del Día Mundial contra la Hepatitis, 28 de julio, detalló que hasta la semana epidemiológica número 29, en el territorio oaxaqueño, la institución ha notificado 297 casos de hepatitis tipo “A”, tres de “B” y dos de “C”.
Asimismo dijo que en coordinación con el Instituto Mexicano del Seguro Social (en su régimen Oportunidades) se han atendido 15 brotes epidemiológicos, de los cuales siguen activos nueve distribuidos en el mismo número de municipios.
Aseguró que la hepatitis “A”, es la más frecuente y se produce por un virus que se transmite a través de alimentos contaminados, así como en agua y bebidas, cuyo germen se encuentra en las heces que eliminan las personas infectadas, así como la mala higiene.
Destacó que los signos y síntomas son; cansancio, nauseas, fiebre, pérdida de apetito, dolor de estomago, evacuaciones diarreicas e ictericia (coloración amarilla en piel), por lo que exhortó a la población a lavarse las manos antes de comer y después de ir al baño, consumir agua hervida o clorada, así como desinfectar correctamente frutas y verduras.
Y es que dijo que el grupo de edad más afectado son los niños de cinco a nueve años, seguido del de uno a cuatro, sin que hasta el momento se haya registrado ninguna defunción, de igual forma hizo un llamado a la ciudadanía a no automedicarse para evitar complicaciones.
Destacó que durante la administración del gobernador del estado, Gabino Cué Monteagudo, y del secretario de Salud, Germán Tenorio Vasconcelos, se busca prevenir daños en la población mediante acciones preventivas y de promoción en las unidades de primer nivel.
Finalmente, dijo que en caso de presentar los síntomas antes mencionados acudan a su unidad de salud más cercana, poniendo especial énfasis en los infantes y adultos mayores.
Vías de transmisión
• Virus A: fecal-oral. La forma de transmisión más frecuente es por el agua contaminada: verduras lavadas con esta agua, mariscos de aguas pantanosas, por lo que la higiene es fundamental para una buena prevención. También se puede contagiar por una persona infectada.
• Virus B: Por vía parenteral, es decir por transfusiones, heridas, jeringas contaminadas, por contacto sexual al estar presente los virus en los distintos fluidos corporales (semen, saliva) o heridas.
• Virus C: Vía parenteral, contaminación con sangre infectada, vía sexual –muy poco frecuente–, se cree que se transmite por vía parenteral únicamente en aquellos casos en los que haya relaciones sexuales con sangrado y altos niveles de daño en la mucosa anogenital.