La derecha proeuropea griega se impuso a la izquierda radical y quedó en condiciones de formar un nuevo gobierno de coalición con los socialistas tras las legislativas de ayer, que alejaron el espectro de una salida del país de la eurozona y contra la política de ajustes a cambio de los rescates financieros de la Unión Europea, el Banco Central Europeo (BCE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI).
En tanto, el Partido Socialista (el PS) del presidente François Hollande logró la mayoría absoluta en la Asamblea Nacional (Parlamento), en la segunda vuelta de las legislativas en Francia, lo que permitirá al jefe de Estado aplicar su programa de “cambios a fondo” sin trabas, lo que supone un vuelco ante la política de ajustes del ex presidente conservador Nicolas Sarkozy.
Con una abstención récor de 44%, el PS y sus aliados de izquierda lograron según resultados parciales de 308 a 320 de los 577 escaños, es decir mucho más allá del umbral de la mayoría absoluta (289).
En Grecia, los conservadores de Nueva Democracia (ND), de Antonis Samaras, lograron 29.96% de los votos, lo cual les asegurará 130 escaños de los 300 del Parlamento. La desproporción entre porcentaje de votos y número de escaños se debe a que la Constitución atribuye 50 asientos adicionales al partido que queda en primera posición.
En segundo lugar, con 26.65% y 71 escaños quedó la formación de izquierda radical Syriza, de Alexis Tsipras, que ha denunciado los ajustes impuestos a Grecia, y rechazó ayer hacer alianza con Samaras.
Tsipras admitió su derrota y dijo que su partido llevará a cabo una oposición activa “contra el memorando” o programa de austeridad a cambio de fondos para evitar la quiebra del país. Samaras llamó de inmediato a amarrar al país al euro y formar un gobierno de coalición: “Instamos a todas las fuerzas políticas que comparten el objetivo de mantener al país en el euro a participar en un gobierno de unión nacional”, afirmó.
“El pueblo griego votó por que Grecia permanezca en el euro, el país no tiene un minuto que perder. No podemos seguir con la ciudad a la deriva”, dijo Samaras ante una multitud ante el palacio de Zappeion, que lo había recibido al grito de “Acá está, este es nuestro primer ministro”.
Pero los socialistas pusieron una condición para hacer alianza y es que se sume el partido Izquierda Democrática (Dimar), que con 6.11% de votos y 16 curules queda en el centro del juego para sacar a Grecia de la parálisis en la que se sumió tras los comicios del 6 de mayo. El partido neonazi Amanecer Dorado logró un 6.92% de votos y 18 escaños y el comunista KKE, último partido estalinista de Europa, 4.49% y 12 escaños.
Samaras pide “renegociar” el programa de ajustes y Tsipras exige “medidas de crecimiento” para un país en recesión desde 2007, según el esquema del presidente francés Francois Hollande de reducir el déficit pero apostando al crecimiento con inversión en infraestructuras para fomentar el empleo.
Desde el balneario mexicano de Los Cabos, en Baja California Sur, el presidente de la Unión Europea, Herman van Rompuy, envió un mensaje a Atenas, a la que prometió apoyo mientras espera la “rápida formación de un gobierno”.
También el FMI se declaró “listo para comprometerse” con el próximo gobierno griego la víspera de la cumbre del Grupo de los 20 (G20) hoy y mañana en Los Cabos, con eje en la crisis europea.
El gobierno alemán de Angela Merkel —quien llamó por teléfono a Samaras— dijo a su vez que Grecia respetará sus compromisos europeos en materia de reformas.
“No puede haber cambios sustanciales en los compromisos”, pero “puedo imaginar sin problema que negociemos de nuevo los plazos”, adelantó el ministro germano de Relaciones Exteriores, Guido Westerwelle.
También Estados Unidos se congratuló: “Creemos que está en el interés de todos que Grecia permanezca en la zona euro respetando a la vez su compromiso con la reforma”, dijo el vocero de la Casa Blanca, Jay Carney.
En Francia, donde el Partido Socialsta no lograba el control del Parlamento desde 1981, con el triunfo de François Mitterrand, hubo ayer otro hito: el reingreso a la Cámara baja, por primera vez desde 1997, del partido de extrema derecha Frente Nacional, de Marine Le Pen, con dos diputados electos, uno de ellos Marion Maréchal-Le Pen, nieta del fundador del partido.
UE y FMI llaman a formar gobierno rápidamente
Líderes de la Unión Europea (UE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI) llamaron a Grecia a formar gobierno rápidamente tras los comicios de ayer, por lo que brindaron su apoyo a las nuevas autoridades, a las que pidieron apegarse a los programas de austeridad pactados.
La jefa del gobierno alemán, Angela Merkel, consideró que Grecia respetará sus compromisos, después de la victoria del partido de derecha Nueva Democracia (ND). Antes de viajar a Los Cabos (México) para la cumbre del grupo de países desarrollados y emergentes (G20), Merkel llamó a Antonis Samaras, presidente de ND y lo felicitó, informó su gobierno. “Parte de los principios de Grecia es respetar los compromisos europeos”, dijo un comunicado de Atenas.
“Tenemos la esperanza de que los resultados de la elección permitirán que se forme un gobierno rápidamente”, confió a su vez el presidente de la UE, Herman van Rompuy. También le pidió a Samaras que se apegue al programa económico negociado con sus socios de la zona euro, lo que permitió un rescate multimillonario que facilitó una reestructuración de su deuda pública en manos de privados, sin la cual el país habría quebrado.
EFE
