* Tras el despido de 2121 trabajadores han ocurrido tres muertes por desatención, una parturienta y su bebé en Juchitán, y una niña con cáncer en el Hospital de la Niñez. Otra embarazada dio a luz en la calle al no ser atendida en el CESSA de San Jacinto Amilpas.
* La corrupción de los miles de “aviadores” rebasa lo imaginable, un médico del Hospital de la Niñez cobraba al mismo tiempo en tres lugares diferentes, otro cobró por años como directivo médico, además de chicas “scorts” y hasta “porros” de la Universidad Autónoma Benito Juárez.
(Los contagios de la COVID-19 continúan golpeando a nuestros familiares y amigos. Clamamos al cielo por la salud y pronta recuperación de nuestros queridos compadres Porfirio Chagoya Méndez y Patricia Villanueva Abraján; que Dios Nuestro Señor les bendiga, cuide y proteja, al igual que a todos los enfermos. Abrazo fraterno y solidario a toda la familia)
El infierno del colapso financiero de la Secretaría de Salud es una crisis histórica largamente larvada desde la descentralización de los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO), iniciada en 1982.
Durante el conversatorio del movimiento social ciudadano #Unidos por Oaxaca #UNO sobre la Crisis Humanitaria de Salud en Oaxaca, se pusieron de manifiesto tres causas fundamentales:
Los médicos Gabriela Colín Altamirano y Luis Vásquez Santiago señalaron como causas, a través de ECMC, la escandalosa corrupción, las mafias familiares y la improvisación, largamente añejadas.
La corrupción en la modalidad de “aviadores” existentes rebasa lo imaginable, por ejemplo, un médico general del Hospital de la Niñez cobraba, al mismo tiempo, en tres lugares diferentes.
Había otro personaje al que apenas conocieron los médicos y demás trabajadores, que llegaba a cobrar religiosamente durante varios años, como directivo médico en el Hospital de la Niñez.
Pero no son los únicos casos que merecen la condena de pueblo y gobierno y la obligada sanción legal correspondiente. Entre los “aviadores” aparecen chicas “scorts” y “porros” de la UABJO.
Los galenos Colín y Vásquez advirtieron que con el paso de los días se agrava la crisis humanitaria, provocada por el despido del personal de salud, al generarse muertes por la desatención médica.
Puntualizaron que tras el despido de 2121 trabajadores han ocurrido tres muertes por desatención de una parturienta y su producto en Juchitán, y una niña con cáncer en el Hospital de la Niñez.
Otra mujer embarazada con trabajo de parto no pudo ser atendida en el Centro de Salud con Servicios Ampliados (CESSA) de San Jacinto Amilpas, por falta de médico y dio a luz en la calle.
A ello se suma la falta de atención de miles de pacientes en el estado, muchos de ellos contagiados de la COVID-19, durante la actual tercera ola, por falta de médicos y demás personal de salud.
Ambos médicos que aman su profesión, con vocación y compromiso de servicio, externaron su preocupación porque la falta de atención médica provoque más muertes por la falta de personal.
Con visión y sensibilidad, los coordinadores del Movimiento Único de Trabajadores Eventuales de los Servicios de Salud de Oaxaca (MUTESSO), apuntaron propuestas de solución a las autoridades.
Vía Zoom de manera virtual por Editorial Corporativo de Medios de Comunicación, que dirige Cornelio Merlín Cruz, señalaron que mucho daño ha hecho imponer a improvisados en los SSO.
Los médicos Gabriela Colín Altamirano y Luis Vásquez Santiago coincidieron en pronunciarse por convertir la crisis del sector salud en una oportunidad de crecimiento y desarrollo en Oaxaca.
Para conseguirlo, propusieron realizar un proceso de reingeniería a fondo en la Secretaría de Salud iniciando con un censo del personal en todos los centros de trabajo de los Servicios de Salud.
A partir de esta base de datos, los médicos del Hospital de la Niñez sugieren analizar el perfil laboral de plazas asignadas y su confirmación, modificación y reubicación en centros de trabajo.
No obstante su optimismo, con realismo reconocieron que es difícil realizarlo, por compromisos políticos y económicos con los dirigentes de la Sección 35 del SNTSA y las subsecciones sindicales.
Insistieron que el gobernador Alejandro Murat Hinojosa tiene la oportunidad histórica de sanear el colapso financiero, por la crisis administrativa provocada al contratar plazas sin presupuesto.
Subrayaron que con voluntad política del Ejecutivo estatal es posible lograrlo, pues antes del despido de 2121 trabajadores, el 15 de septiembre, en meses anteriores, cesaron a “aviadores”.
Reiteraron que, si hay voluntad política del gobierno federal y estatal, la solución es simple y sencilla: dar de baja a las numerosas mafias familiares que proliferan en el sector salud.
En este sentido, en lugar de despedir a médicos, enfermeras y demás personal de salud, deben cesar a los familiares, amigos y compadres, de ex gobernadores y políticos de todos los partidos.
También deben cesar a novios, novias y amantes de estos, a los familiares, amigos y compadres de dirigentes sindicales y de organizaciones sociales, y de diversos funcionarios, incluso, de los SSO.
Confían en la palabra empeñada por el presidente Andrés Manuel López Obrador, en su reciente gira por el Istmo de Tehuantepec y esta capital, al comprometerse que serán recontratados.
Temen que el director general del INSABI, Juan Antonio Ferrer, y del IMSS Bienestar, Zoe Robledo, no cumplan con la instrucción presidencial, al desconocer la compleja realidad oaxaqueña.
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