Irreverente y contestatario, insisto, audaz y temerariamente, que el triunfo presidencial de Manuel Andrés López Obrador (MALO) y de los candidatos del partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), de ninguna manera, es inevitable en México y Oaxaca.
De manera consciente, informada y responsable, me atrevo a desafiar la ensoberbecida ira de las hipócritas buenas conciencias y de los políticamente correctos que, por interés y conveniencia personal, se han sumado a las hordas del Mesías Tropical para lavar su corrupción.
Ejerzo así a plenitud el sagrado derecho a la libertad de expresión y el derecho a la información y formación de opinión que gozan alrededor de 128 millones de habitantes de México. En la jornada electoral está en juego el proyecto de nación, la libertad y la esclavitud.
Pocos mexicanos en el país, además de los cuatro millones de mexicanos han sufrido en carne propia la permanente violación de los derechos humanos fundamentales a la libertad y a la legalidad, representados por el libre tránsito y la educación pública.
Las diversas modalidades de movilizaciones, marchas, plantones, bloqueos de calles y carreteras, toma de oficinas y casetas de peaje de Caminos y Puentes Federales de Ingresos (Capufe), así como la retención de vehículos del transporte de pasajeros y mercancías, dura ya 50 años.
En el prefabricado conflicto de 2006 en Oaxaca para intentar tirar del gobierno a Ulises Ruiz, se aplicó ya la actual recomendación de Paco Ignacio Taibo II de expropiar o tomar propiedades.
A los activistas de las organizaciones sociales que conformaron la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO), se les engañó y manipuló para que escogieran las viviendas que quisieran.
Propietarios de viviendas en las zonas residenciales de la capital oaxaqueña, especialmente en la Colonia Reforma y San Felipe del Agua, observaron a los activistas frente a sus hogares.
En tales condiciones, no podemos menos que hacer un vehemente llamado a la conciencia de los dos millones 583 mil 289 oaxaqueños que deberán acudir a las urnas a ejercer su derecho y su deber de votar que lo hagan de manera libre, consciente, informada y responsable.
Y que al hacerlo piensen no solo en los partidos políticos, sino en la calidad humana de los candidatos a Presidente de la República, Senadores, Diputados federales y locales, Presidentes y Concejales municipales. Es el criterio más saludable y positivo a utilizar al votar.
¿Usted, querido lector, votaría por familias enteras que monopolizan candidaturas como la formada por Benjamín Robles Montoya y Maribel Ruiz Martínez o por candidatos acusados de probable corrupción por 1200 millones de pesos en SEDAFPA como Salomón Jara Cruz?
Quienes piensan y desean la inevitabilidad del triunfo de López Obrador olvidan que en política no hay nada escrito y, sobre todo, que el pueblo mexicano es sabio. Solo los fanáticos fundamentalistas marxista-leninistas y los resentidos y desadaptados sociales del lumpen proletario, sueñan con una dictadura comunista de corte populista.
Habrá grandes sorpresas, no solo en la elección presidencial, sino al Congreso de la Unión, y más en Oaxaca. Para sorpresa de muchos, a pesar de su controvertida imagen y trayectoria, Samuel Gurrión Matías ganaría la presidencia municipal de Oaxaca de Juárez.
Mucho contribuirán al triunfo de Samy, destacadamente, el líder histórico universitario de izquierda Raúl Castellanos, a quien no alcanzó a coberturar el Partido Nueva Alianza. La exitosa campaña a la alcaldía arrebatará miles de votos a la izquierda, sobre todo, en Morena,
Sin llegar a ser meramente testimonial un escenario semejante ocurrirá con el propio candidato del PRI a la alcaldía capitalina, Manuel de Esesarte Pesqueira. Mucho daño le hizo por consigna el videoapoyo de Luis Ugartechea, acusado de saquear el Ayuntamiento capitalino.
Contra todas las opiniones interesadas y encuestas a modo, utilizadas como propaganda, reitero que Pepe Meade Kuribreña ganaría la elección presidencial. MALO perdería por tercera ocasión consecutiva la presidencia, lo que le enloquecería al igual que a sus seguidores.
Frente a este escenario, indispensable es que las autoridades electorales del Instituto Nacional Electoral (INE) y del Instituto Estatal Electoral y de Participación Ciudadana de Oaxaca (IEEPCO), respeten y hagan respetar el cumplimiento de la ley, prevean y eviten sabotajes.
La misma obligación tienen las Fuerzas Armadas y las autoridades federales, estatales y municipales, en materia de seguridad nacional y seguridad pública, porque Manuel Andrés López Obrador “soltará al tigre” y Yeidckol/Citlalli “hará aparecer al diablo”. El riesgo de violencia es real.
De manera especial, la Policía Federal Cibernética, con apoyo de las agencias estadunidenses de seguridad nacional, debe mantenerse vigilante de la intervención de los hackers rusos en la jornada electoral, como lo hicieron en la Unión Americana para imponer a Trump.
La mejor manera de inhibir y desactivar cualquier injerencia rusa en franca violación de la soberanía nacional de México, es hacer de inmediato las denuncias correspondientes por la vía diplomática ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU), aunque habría tener mucho cuidado en Oaxaca por el acompañamiento de la Defensoría de los Derechos Humanos que usufructúa Arturo de Jesús Peimbert Calvo.
Aventurar el triunfo de Pepe Meade, no son simples buenos deseos ni mejores intenciones. Es resultado de un ejercicio de creación de escenarios futuros inmediatos. La más genial estrategia del nuevo PRI-gobierno, fue engañar con la verdad al viejo PRI de Manuel Andrés López Obrador.
El Presidente nos estuvo diciendo que el candidato de su partido sería José Antonio Meade al placearlo, al enviarlo a diversos actos en calidad de su representante, lo hizo presidir reuniones importantes y en general, dejó que corriera la especie que él era ya, el designado.
La nomenklatura del PRI-gobierno dejó correr las encuestas que supuestamente señalaban como permanente puntero a Manuel Andrés López Obrador y con ello el creciente triunfalismo del candidato presidencial vitalicio de la izquierda radical de corte populista a sabiendas que no eran reales.
Si bien es cierto que deterioraron gravemente la imagen del Presidente Enrique Peña Nieto con millones de bots en las redes sociales, manejados desde Rusia y Ucrania, a través de las redes sociales durante cinco años, no es menos cierto que finalmente se pierde o gana en las urnas.
Nadie en su aparente sano juicio, pero solo de manera aparente, apostaba que José Antonio Meade Kuribreña sería el candidato presidencial del llamado nuevo PRI. Y lo fue por razones globales estratégicas que explicaré a detalle más adelante.
Los momios favorecían fingidamente a Miguel Ángel Osorio Chong, responsable de la política y seguridad interior, por tanto, responsable del baño de sangre en México, por la estúpida guerra contra el narcotráfico y el fracaso de la política en seguridad pública. El presidente lo dejó caminar para proteger a Meade.
A sabiendas que no sería el elegido, Aurelio Nuño Mayer participó hábilmente en la perversa maniobra de simular que sería destapado por ser el hombre del Presidente y vivir en el corazón de Enrique Peña Nieto. También lo hizo para proteger a Pepe Meade.
Por su lealtad a toda prueba con su amigo el Presidente y su institucionalidad con el país, el ex Secretario de Educación Pública fue premiado con la Jefatura de la Coordinación de la Campaña Presidencial de su también amigo José Antonio Meade Kuribreña.
De hacerse realidad en unas horas más este ejercicio de creación de escenarios políticos en un futuro inmediato, seguramente la lealtad e institucionalidad de Aurelio Nuño Mayer sería premiado con la Secretaría de Gobernación en el gabinete de Pepe Meade.
No descartamos que, si Pepe Meade no crecía al no ser militante del Partido Revolucionario Institucional (PRI), en un momento dado, podrían enfermarle y sustituirle con Aurelio Nuño en un paralelismo con Luis Donaldo Colosio y Ernesto Zedillo, quien también provenía de la SEP.
Tampoco descartamos que, dada la ascendencia judía materna de ambos, los centros financieros internacionales, encabezados por Wall Street, los Rothschild y la City de Londres, en manos de la plutocracia judía, votaron anticipadamente por el triunfo de Pepe Meade.
Entendible, no justificable, porque a nuestro juicio Aurelio Nuño Mayer tiene más fuerza de carácter como lo ha demostrado al enfrentar a la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) en defensa de la Reforma Educativa, una de las más importantes
A querer o no, guste o no, la terca realidad finalmente termina por imponerse y en medio del resurgimiento del capitalismo salvaje en la globalización, antesala de la imposición del Nuevo Orden Mundial (NOM), el voto de los centros financieros internacionales es definitivo y definitorio.
Según logramos establecer, después de las 15 horas la tendencia fortalecería el triunfo de Pepe Meade. No será sorpresa. Las encuestas engañaron a El Peje. Alrededor de las 12 horas de mañana domingo 1 de julio iniciará la tendencia hacia el triunfo de Pepe Meade. El reconocimiento de la derrota por Ricardo Anaya Cortés, es otro signo más que claro.
La presidenta del máximo tribunal electoral del país, la magistrada Janine Otálora, reconoció que “las elecciones de este año serán extremadamente complejas y pondrán a prueba nuestra joven democracia” al garantizar que el proceso será plenamente transparente y de cara al electorado.
El Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) resolverá a más tardar el 6 de septiembre las impugnaciones que presenten los partidos o coaliciones a la elección presidencial y ese día deberá calificar la elección y declarar la validez del mandatario electo.
@efektoaguila