“Si quieres cambio verdadero, camina distinto”
Calle 13 en “Vamos a dar la vuelta al mundo”
Hace unos días caminando por las calles de Oaxaca me encontré con una marcha, (de esas de las que casi no hay), por esta bella ciudad; y me quede frío al ver a un manifestante con una pancarta con la leyenda, que retrata muy bien lo que sucede en el Estado de las tlayudas y el mezcal, “Gabino puedes o le hablamos a Ulises”. Y es que nada de esto es importante si no fuera porque a casi dos años de gobierno del “cambio” en Oaxaca tal parece siguen atravesando la curva de aprendizaje, cosa que es risible, pues se acerca el segundo informe del Gobernador y todo indica no tiene mucho que presumir.
Si bien es cierto Gabino Cué y su camarilla logró sacar al PRI de Oaxaca no sólo se trataba de eso sino de entregar resultados a los oaxaqueños que hace dos años depositaron su confianza en las urnas; y es que para prueba un botón si antes los priístas abusaban de la ley estos del “cambio” ni la conocen, si los de antes vaciaban las arcas públicas de manera discrecional, estos lo hacen de manera cínica; imagine usted estimado lector la desesperación de los oaxaqueños que piden el regreso de un tirano, todo indica a los ciudadanos no les interesa si el gobierno es de izquierda de derecha o de centro lo que ellos quieren son mejores condiciones económicas, de empleo, de salud y sobre todo mejores servicios públicos; tan es así que circula en las redes sociales una oración popular que dicta: “San Juditas Tadeo cuídame del bloqueo, Santo Niño del Istmo que regrese el turismo, San Agustino que reaccione Gabino y San Alejo que se vayan los pendejos”
Pedir el regreso de un tirano es una desesperanza para Oaxaca que desilusionada del “cambio” prefiere a los “corruptos que a los pendejos”, ya que todo cambió para que nada cambiará; las dependencias de gobierno siguen siendo negocios familiares, los del “cambio” transan con todo, con la política, con la salud, con la justicia, con el turismo y cualquier otra bandera que les sirva para encubrir sus negocios turbios y sucios; a este paso el regreso del PRI a Oaxaca es inminente prueba de ello serán las elecciones concurrentes del 2013 donde se augura que el PRI recuperará terreno. Si a los del “cambio” en Oaxaca esta reciente elección presidencial no les enseñó el mal gobierno se paga en las urnas están perdidos y entonces preparan el terreno para que los que tanto repudiaron en campaña electoral regresen a el poder.
Así pues, todo parece indicar con tanta ineptitud el más interesado en que el PRI regrese a gobernar Oaxaca es Gabino Cué, que ante la ineficiencia de su gabinete no quiere entender que para cambiar las cosas se deben hacer de manera distinta, cuánta razón tenía Giuseppe Tomasi di Lampedusa al argumentar que “Si queremos que todo siga como está, es necesario que todo cambie.”
*Politólogo