Ante los lamentables acontecimientos que derivaron este sábado 23 de octubre en el asesinato de Heriberto Pazos Ortiz, dirigente del Movimiento Unificador de Lucha Triqui (MULT) y fundador del Partido Unidad Popular (PUP) el licenciado Gabino Cué Monteagudo, Gobernador electo del estado de Oaxaca manifiesta lo siguiente:
1.- Condena enérgicamente la privación de la vida de cualquier oaxaqueño o oaxaqueña y se pronuncia por un alto a la violencia como forma de expresión. Y en el caso de atentados en contra de dirigentes y activistas sociales, como es el caso de Pazos Ortiz, quien luchaba por defender las causas de sectores marginados, estos hechos lastiman enormemente al tejido social.
2.-Nuestra exigencia a las autoridades de procuración de justicia para un pleno esclarecimiento del crimen, y se den los pasos necesarios hacia una estricta aplicación de la ley en contra de sus autores, y desalentar cualquier asomo de impunidad.
Un tratamiento similar de investigación y castigo requieren los crímenes que han acabado con la vida de numerosos activistas y dirigentes sociales en el sexenio actual, entre ellos el de Catarino Torres Pereda, líder del Comité de Defensa Ciudadana, ejecutado ayer, en la ciudad de San Juan Bautista Tuxtepec.
3.-Heriberto Pazos Ortiz era una figura clave para la distensión de la situación existente, por múltiples causas, en la región triqui, y hacia la construcción de una paz duradera en la zona.
4.- Estos acontecimientos que ensombrecen el clima social y político actual nos deben llevar como sociedad a una reflexión más profunda sobre la necesidad de seguir construyendo un ambiente de civilidad y de democracia plena.
5.- Por tanto, hago un respetuoso llamado a la sociedad en general y a los actores políticos y sociales en lo particular a mantener la ecuanimidad, la inteligencia y la prudencia en nuestros actos para superar estos momentos difíciles.
Cualquier diferencia, siempre hemos dicho, debe resolverse en el marco del diálogo respetuoso y la tutela de las instituciones.
6.-En este marco, el Poder Ejecutivo estatal tiene que asumir su responsabilidad como garante de la seguridad pública como un medio para proteger el patrimonio y la vida de todos los gobernados.
7.- El Gobierno que tomará la responsabilidad del estado a partir del próximo 1 de diciembre, reitera su compromiso de seguir abogando por la reconciliación entre todos los miembros de la sociedad, y empeñar todos nuestros esfuerzos por el restablecimiento de la concordia y la legalidad como requisitos indispensables de la paz social, el progreso y el bienestar.
8.- Las oaxaqueñas y los oaxaqueños tenemos la suficiente fortaleza de espíritu como para seguir sosteniendo la bandera del diálogo y la fe en la reconciliación como vías sólidas para construir el futuro que siempre hemos soñado; y estén seguros que como Gobierno nada nos detendrá para conducir a Oaxaca, en el marco del Estado de Derecho, por los caminos de una paz duradera y la armonía social.