Los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO) exhortan a madres, padres o cuidadores, a vigilar el desarrollo en la primera infancia de las y los hijos, a través de la consulta del niño sano, en la unidad médica que le corresponda.
La responsable estatal del componente Atención integrada al menor de un año y vigilancia en la primera infancia, Alicia Gaona Bonaparte informó que el objetivo de dar seguimiento al desarrollo de niños y niñas, es la detección oportuna de problemas del neurodesarrollo a través de la prueba de Evaluación del Desarrollo Infantil (EDI), y la capacitación en estimulación temprana y prácticas de crianza.
Explicó que la prueba EDI es un instrumento de tamizaje, diseñado y validado en México para menores de cinco años, la cual evalúa las áreas del desarrollo motriz, lenguaje, social, adaptativo y cognoscitivo; además de las áreas del desarrollo, el instrumento evalúa cuatro ejes más: Factores de riesgo biológico, Exploración neurológica, Señales de alerta y Señales de alarma.
Dijo que en lo que va de este 2019 se le aplicó la prueba a mil 488 niñas y niños menores de cinco años, de los cuales el 5.24% (78 infantes) obtuvieron resultado rojo (riesgo de retraso en el desarrollo), sin embargo fueron referidos al segundo nivel de atención para su valoración y seguimiento correspondiente.
Y es que aseguró que el desarrollo de la infancia es un proceso continuo y extraordinariamente complejo en el que la interacción de los aspectos biológicos, psicológicos y sociales, conforman progresivamente las habilidades y conocimientos que permitirán al niño relacionarse satisfactoriamente con su entorno.
La experta dijo que los primeros mil días de vida comprenden el periodo que transcurre desde la concepción hasta cumplir los dos años de edad, los cuales son de vital importancia ya que además, “en este periodo ocurre el 80% de las conexiones neuronales y es cuando el cerebro tiene transformaciones que definen las características propias del ser humano”.
Resaltó que la detección oportuna de problemas del desarrollo infantil se debe realizar a partir del primer mes de nacido y hasta los cinco años de edad, ya que en este periodo quedan consolidados los aspectos más significativos y decisivos para alcanzar el funcionamiento óptimo de las capacidades de integración adecuada a la sociedad.
Finalmente mencionó que acudieron a capacitación en estimulación temprana seis mil 592 madres, padres o cuidadores de menores, por lo que recordó que la salud debe ser una responsabilidad compartida e hizo el exhorto para asistir a la consulta del niño sano.