Aproximadamente mil 035 muertes anuales en Oaxaca son atribuibles al consumo del tabaco, según las estadísticas estatales existen 252 mil fumadores, de los cuales 14 mil 512 son personas entre 12 a 17 años, siendo la droga más usada en este grupo de edad, así lo informaron los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO).
La dependencia indicó que la edad de inicio de consumo de cigarrillos en las y los niños en la entidad es entre los 10 y 14 años, quienes tienen mayor probabilidad de consumir otras drogas. El 20% de estudiantes del último año de secundaria fuman en promedio 11 cigarros al día.
En el marco del Día Mundial sin Tabaco, que se conmemora cada 31 de mayo, la institución hace hincapié en la importancia de fomentar una cultura de la prevención mediante la modificación de los determinantes que contribuyan a evitar el uso y abuso de esta droga, mediante el deporte y actividades artísticas, principalmente desde la infancia.
En este contexto, la institución señaló que el tabaquismo no solo daña a los pulmones, también puede ocasiones graves consecuencias en casi todos los órganos en el cuerpo, incluyendo, el corazón, ya que el riesgo de ataque cardíaco aumenta de dos a cuatro veces.
Así también el hábito de fumar incrementa la posibilidad de desarrollar más de 12 tipos de cáncer, y de padecer hipertensión arterial, infertilidad, osteoporosis, problemas en vasos sanguíneos, enfermedades en garganta, encías, pérdida de dientes, envejecimiento prematuro, deterioro de la condición física, afecta la vida sexual y el sistema reproductivo; en las mujeres ocasiona menopausia adelantada, abortos espontáneos, placenta previa, entre otros.
Explicó que los cigarrillos contienen más de mil 500 sustancias, de ellas alrededor de 43 tienen efectos cancerígenos, como: monóxido de carbono, alquitrán, tolueno, acetona, ácido fórmico, amoníaco, óxido de nitrógeno, formaldehído, arsénico (veneno contenido en los raticidas), cianuro (empleado en la cámara de gas), butano (combustible doméstico), metano (combustible utilizado en cohetes espaciales), cadmio (presente en baterías), por mencionar algunas.
Precisó que, entre los efectos del consumo y exposición al humo de tabaco, es que produce dependencia física y psicológica, inflama la mucosa gástrica causando acidez, mal sabor de boca y con el tiempo graves ulceraciones, altera la producción de las hormonas del crecimiento, reduce la cantidad de oxígeno para el cerebro y otros órganos, origina color amarillento en dientes, manos y uñas, insomnio y dolores de cabeza.
Los fumadores mueren 15 años antes de la expectativa de la media, reduciendo con el consumo la calidad de vida; los cigarros, puros, pipas, vapeadores, cigarrillos electrónicos o productos de tabaco sin humo, causan graves daños a la salud, no existe manera segura de consumir estos productos, advirtió.
Cada año el problema es global, debido a que los cigarrillos también tienen graves consecuencias para el planeta, ya que las personas arrojan millones de colillas a los suelos, las cuales generan un fuerte impacto negativo en el medio ambiente.
Por sus componentes que son altamente tóxicos para la vida marina y terrestre, como el acetato de celulosa un derivado del petróleo que tarda 10 años en descomponerse, una sola colilla contamina ocho litros de agua de mar y 50 litros de agua potable.
De ahí, que la dependencia fortalece las acciones de concientización, información y atención a través de pláticas, talleres, conferencias y consultas en los Centros de Atención Primaria en Adicciones (CAPA), así como servicio psicológico en unidades de primer nivel de atención de manera gratuita, para que cada vez sean más las personas que dejen de fumar y se eviten muertes y padecimientos prevenibles.