Integrantes del Frente Nacional de Sindicatos de Educación Media Superior en el país, (FNSEMS), anunciaron un paro nacional de labores para el 22 de junio, así como no iniciar clases en el mes de agosto, en el marco del nuevo ciclo escolar.
Indicaron que la lucha que van a iniciar es para abatir los grandes rezagos que como trabajadores de la educación siguen padeciendo, toda vez que en reiteradas ocasiones han manifestado al gobierno federal sus demandas, sin que tengan respuestas favorables.
Piden que se cumpla con la homologación salarial, promoción docente, recategorización administrativa y prestaciones respecto de los trabajadores de la DGTI.
El pago de manera inmediata del incremento del bono adicional del bienestar anunciado por el Presidente de la República en el año 2022, así como el incremento del 8.2 por ciento, retroactivo a enero de este año; y así mismo los 16 mil pesos mensuales como mínimo; tal como lo anunció el presidente de la República el día 15 de mayo.
Exigen la basificación de todas las horas que desde hace muchos años los maestros están impartiendo, y no se les ha reconocido, y de las plazas administrativas para el personal de apoyo a la educación.
Precisaron que derivado de la falta de respuesta del gobierno federal a dichas demandas, los sindicatos de los subsistemas CECYTE, COBACH, CONALEP y TELEBACHILLERATOS, con más de 120 mil trabajadores, quienes atienden a más de 3.5 millones de estudiantes en el país, se suman a la jornada de lucha.
“Es por ello que exigimos una mesa de trabajo que, de no darse, hacemos responsables a las autoridades federales por las afectaciones que esto ocasione al desarrollo académico de nuestros estudiantes; ya que, de no existir la voluntad política y respeto hacia los trabajadores de la educación, no nos queda otra alternativa más que la protesta unitaria, para defender nuestros legítimos derechos y el bienestar de nuestras familias”, expresaron.
Diana Méndez