La falta de higiene es un factor determinante para la aparición y propagación de piojos, ante ello, los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO) mantienen la vigilancia epidemiológica y han registrado hasta la fecha, 10 brotes de pediculosis de los cuales cuatro siguen activos.
En entrevista, el jefe del departamento de Urgencias y Desastres Epidemiológicas de los SSO, Javier Salazar Ventura, indicó que los cuatro brotes activos se ubican en tres municipios de Valles Centrales y uno en la Jurisdicción Sanitaria de la Mixteca, siendo el grupo de edad más afectado el de cinco a 14 años.
Ante este panorama, el funcionario exhortó a padres de familia para que revisen a sus hijos, además de solicitar el apoyo de los docentes en la vigilancia, ya que el traspaso de los piojos es más frecuente en las escuelas por el contacto de los educandos, así como el uso de gorras, peines y cepillos contaminados.
Explicó que el parásito deposita sus huevos, los que se conocen como “liendres” y en el transcurso de una semana aproximadamente, nacen los nuevos piojos, mismos que se alimentan con sangre, tomando cada uno un mililitro por día.
Agregó que la pediculosis puede transmitirse a otra persona sin importar edad y es causado por tres tipos: los que se alojan en la cabeza, cuerpo y pubis, mismos que tienen un promedio de vida de 33 a 35 días y miden de tres a cuatro milímetros de largo.
Detalló que los síntomas son: comezón intensa, puntos rojos, ronchas, inflamación y enrojecimiento de la piel acompañadas de erosiones por rascarse, si existe una contaminación masiva de piojos, la piel aumenta su grosor y adquiere pigmentación oscura debido a la frecuente irritación.
Finalmente exhortó a la población a bañarse diariamente, cambiarse la ropa todos los días, así como el cambio frecuente de sábanas, no usar o prestar peines, cepillos ni accesorios para el cabello, evitar el contacto cercano (cabeza a cabeza) y sexual con personas infestadas.
Recomendaciones para evitar el contagio:
- Revisar periódicamente la cabeza de los niños y los otros miembros de la familia.
· Lavado frecuente de la cabeza, si es posible diario con shampoo o jabón común.
· Peinar con peine fino desde la raíz del pelo a la punta.
· Se recomienda especialmente lavar con agua caliente peines, fundas, sábanas y gorros, para evitar la reincidencia.
