Expromotores comunitarios de la Cruzada Nacional Contra el Hambre (CNCH) de la región de la Cañada no sólo fueron humillados y explotados por la Secretaria de Desarrollo Social (Sedesol), sino también despedidos por no acatarse a los intereses políticos y económicos del ex diputado federal Elpidio Concha Arellano.
Los afectados quienes omitieron sus nombres por temor a represalias, relataron que este programa más que enfocarse a combatir la pobreza y marginación se ha convertido en una red de corrupción.
“Tenemos compañeros que fueron despedidos injustificadamente sin goce de sueldo incluso a algunos se les exigió 10 mil pesos para poder formar parte del mismo”, denunciaron.
Los ex trabajadores señalaron que desde la llegada de Pablo Jiménez Cuevas fiel servidor del ex diputado federal este programa perdió sus verdaderos objetivos.
Recordaron que en septiembre del 2014 cuando se hizo presente en esta zona se dedicó a limpiar la plantilla de los empleados toda vez que colocó a sus allegados y a quienes militan en el Partido Revolucionario Institucional (PRI).
“Los nuevos promotores tenían algo en común conocían al ex diputado federal Elpidio Concha Arellano, quien fue acusado de asesinar a un maestro”, señalaron.
Para lograr sus objetivos a los manifestantes se les acusó de incumplimiento y desobediencia a las acciones y trabajo que él ordenaba a través de una serie de reportes que presentó ante la Sedesol.
Al menos 15 promotores fueron blanco de sus intereses políticos y económicos debido a que les requirió la cantidad de 500 pesos para poder formar parte de la plantilla de trabajadores del CNCH programa que desconoce de su funcionamiento.
Incluso el hombre quien ha sido acusado en la región por liberar a delincuentes con sus influencias se ha dedicado a acosar a las mujeres a quienes invita a pasear en las camionetas oficiales de la dependencia.
“Cuando acudía a las reuniones de promotores y coordinadores el licenciado Pablo no dejaba de morar mis piernas y en la entrepierna”, sostuvo una de las víctimas.
Con el pretexto del proceso electoral el funcionario aprovechó para despedirnos incluso nos obligó a acudir a reuniones para apoyar al candidato a la diputación Álvaro Rubio o de lo contrario tendríamos que atenernos a las consecuencias.
Además fueron obligados a entregar el trabajo generado al entonces coordinador Municipal Francisco Limones originario de Chiapas quien junto con la Subdelegada de Desarrollo Comunitario y Participación Social, Silva Solís encubren a Pablo Jiménez protegido de Elpidio Concha Arellano.
“Entre estos tres personajes existe complicidad ya que luego de trabajar en la comunidad de Loma Mango en Santa María Chilchotla Francisco Limones nos pidió el documento que elaboramos para después cobrar nuestro trabajo y a nosotros nos despidió después de hacer la labor correspondiente sin goce de sueldo”, acusaron.
Por lo que exigimos a las autoridades correspondientes tomar cartas en el asunto.
Carina García/Libertad-Oaxaca.info