Diana Mendez
A 36 años de la desaparición de Modesto Patolzin Moicén, integrantes del magisterio democrático de la Sección XXII de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) mantienen viva la exigencia de justicia y la presentación con vida del activista sindical, quien fue víctima de la represión durante la llamada Guerra Sucia en Oaxaca.
Patolzin, quien se destacó por su lucha en favor de la democratización del sindicato magisterial, enfrentó amenazas de muerte por parte del grupo Vanguardia Revolucionaria, el cual mantenía el control de la Sección XXII con apoyo del PRI y la dirigencia nacional del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE). Su activismo, especialmente al asumir la Supervisión Escolar en 1987, lo convirtió en blanco de represalias debido a sus esfuerzos por reubicar a docentes que cobraban sin trabajar, una práctica común protegida por la cúpula sindical de aquel entonces.
La última vez que se tuvo noticias de Modesto Patolzin fue el 24 de febrero de 1988, cuando viajó a la ciudad de Oaxaca para recoger un documento oficial. Posteriormente, se reportó que había recibido una nueva orden de comisión para trasladarse a San Juan Cacahuatepec, pero desde ese momento, su paradero se desconoce.
Desde entonces, el magisterio democrático ha mantenido viva su memoria, exigiendo justicia y denunciando las desapariciones forzadas como un mecanismo de represión contra quienes luchan por mejores condiciones laborales y educativas.
