Si el Gobierno del Estado no interviene en el conflicto de San Miguel Peras y Santiago Clavellinas, Zimatlán de Álvarez, podría desencadenarse un enfrentamiento entre ambas poblaciones, lo que podría significar un baño de sangre que nadie quiere.
Así lo dio a conocer el presidente de bienes comunales de San Miguel Peras, Leonardo Velasco Hernández, quien este día llegó con un grupo de comuneros a solicitar una audiencia con el gobernador del Estado, Gabino Cué Monteagudo.
El comunero, explicó que dicho conflicto se debe a la posesión de mil 200 hectáreas que pertenecen a San Miguel Peras, sin embargo los habitantes de Clavellinas de manera reiterada se han apoderado de esas tierras, al mismo que están talando de manera clandestina los bosques de esa zona.
Agregó que el pasado 7 de abril el mismo y otras personas fueron atacados a balazos por personas de Clavellinas, por lo cual la población dijo, se encuentra inconforme y dispuesta de defender sus tierras con las mismas armas.
Finalmente Velasco Hernández, expuso: “han sido muchas las agresiones, nosotros como autoridades ya no podemos contener al pueblo que está muy molesto, por eso solicitamos la intervención de los gobierno estatal y federal para evitar un baño de sangre que a nadie beneficiaría”.