La prevención y el control de chikunyunya dependen necesariamente de la eliminación de criaderos de larvas a través del orden y limpieza de la casas, desyerbar jardines, terrenos baldíos, así como barrer los charcos de calles y banquetas.
Se deben tapar correctamente los depósitos de agua, limpiar las canaletas con regularidad para favorecer el drenaje, cambiar cada tres días el líquido de floreros y bebederos de mascotas para evitar que los mosquitos depositen ahí sus huevecillos.
En entrevista, el director de Prevención y Promoción a la Salud de los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO), Ángel Alfonso Quintero Martínez, detalló que con las intermitentes lluvias que se han presentado, se debe vaciar, tapar o dar vuelta a todo tipo de recipiente que pueda recolectar agua y convertirse en criaderos, como cubetas, baldes, frascos, botellas, juguetes, llantas y hasta corcholatas.
Y es que dijo que hasta la semana epidemiológica número 17, se tienen registrados 243 casos confirmados por laboratorio, 61 por ciento corresponde al género femenino y el 39 a los varones.
Detalló que la jurisdicción más afectada es el Istmo de Tehuantepec con 162 pacientes, 42 en la Costa, 25 en Valles Centrales, seis en Sierra, tres en Tuxtepec, uno en la Mixteca y cuatro más foráneos.
Ante ello aseguró que la participación organizada de la población, autoridades municipales, sector educativo y de salud es fundamental para el éxito de las actividades, principalmente en las acciones de Patio y Vivienda Limpia.
Comentó que la dependencia no bajará la guardia en la implementación de acciones encaminadas a reforzar las actividades de promoción de la salud, control vectorial, atención médica, vigilancia epidemiológica y sanitaria.
Finalmente exhortó a los oaxaqueños a protegerse de las picaduras con repelente sobre la piel expuesta y sobre la ropa, colocar mosquiteros en puertas y ventanas, ya que la salud debe ser una responsabilidad compartida.
