La emisión falsa de facturas alcanzó tal organización, que el SAT localizó en un solo domicilio fiscal -un local de unos cuantos metros- la logística con la que mil empresas se dedicaban a este ilícito.
El tamaño de las operaciones inexistentes cubiertas con facturas han provocado a las arcas del Gobierno la pérdida de alrededor de 90 mil 720 millones de pesos, de acuerdo con Ernesto Luna, administrador general de Auditoría y Fiscalización del Servicio de Administración Tributaria.
“Llegamos al domicilio fiscal, un cuarto pequeño y encontramos que había un anaquel con documentosde la empresa ‘X’, al lado otro anaquel con la empresa ‘Y’ y así sucesivamente.
“En algunos casos hemos visto que un solo domicilio acumula hasta mil 266 contribuyentes que amparan operaciones falsas”, explicó en entrevista.
Luna relató que este es el tipo de contribuyentes que se exhibe en el sitio del SAT como presunto emisor de falsas facturas o, bien, en la lista definitiva de defraudadores.
Estos emisores tienen un RFC bajo algún régimen -persona física o moral- y dan de alta un domicilio fiscal.
Posteriormente, venden las facturas a contribuyentes que las usan para deducir impuestos o acreditar un IVA inexistente.
Desde 2014, cuando se permitió al SAT exhibir los listados a través del artículo 69 B del Código Fiscal, se han dado a conocer más de mil 29 personas físicas y morales son presuntos facturadores falsos, 780 de ellos, o definitivos, 249.
Hay unas 73 mil 125 empresas que han usado los documentos apócrifos de esos emisores, para evadir obligaciones.
En la lista de presuntos falsificadores, 53 mil 941 empresas recibieron esas facturas, por un monto aproximado de 347 mil 995 millones de pesos, y en la definitiva, 19 mil 183 empresas, por 189 mil 401 millones de pesos.
“De ese monto de operaciones, nosotros consideramos que el daño generado a la recaudación es de alrededor de 48 por ciento, 32 por ciento por concepto de ISR y otro 16 por ciento de IVA (90 mil 720 millones de pesos)”, aceptó Luna.
Hasta el momento, de las mil 29 empresas y ciudadanos exhibidos como falsos facturadores, solamente nueve han presentado información suficiente para revertir la acusación del SAT.
Luna aseguró que en 2014 unas 52 personas fueron a dar a la cárcel por este delito, mientras que este año van nueve.
“Pero se trata, en muchos casos, del vigilante o de una persona de la tercera edad que estaba en ese momento en el domicilio, lo importante es llegar hasta el fondo del asunto y encontrar a los verdaderamente beneficiados de esto”, afirmó.
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