Sin duda uno de los desafíos educativos del día de hoy es impartir conocimientos “sobre lo moral”: usted puede hacer que un alumno estudie de memoria ciudades, cifras, etcétera, no evitar que copie y aquí es donde Google está intentando hacer su aporte a la educación en pos de resguardar la originalidad de sus trabajos.
Obviamente, el debate de lo moral pasa por cómo los estudiantes tienen que aprender a navegar la línea entre las ideas de otras personas y las suyas propias, y cómo y cuándo citar fuentes correctamente.
El caso es que Google está brindando informes de originalidad, sobre búsquedas y textos. Esta nueva función, llamada Classroom and Assignments, fue anunciada revelando que el buscador, o una de sus funcionalidades desde ahora, es crear informes de autenticidad de los textos escaneando el trabajo de los alumnos en busca de frases coincidentes en cientos de miles de millones de páginas web y decenas de millones de libros.
De acuerdo a la experiencia de Google, muchos profesores hasta ahora copian y pegan pasajes en la búsqueda de Google para verificar si el trabajo de los estudiantes es auténtico, lo que puede ser repetitivo, ineficiente e impreciso.
De esta forma, los docentes tendrán la opción de habilitar informes de originalidad. Luego, los estudiantes podrán ejecutar hasta tres tests de originalidad en los documentos que adjunten a la tarea antes de enviar su trabajo. Este aviso le da a los estudiantes la oportunidad de mejorar de manera proactiva su trabajo y también les ahorra tiempo a los educadores.
Pues, ahora el debate pasará por otro sesgo de la educación, que es aprender sobre lo que es la confianza. Por lo pronto Google, dirá si lo que los estudiantes hacen, goza de autenticidad o no.
Forbes