Con la aplicación del Horario de Verano desde 1996 se ha logrado un ahorro de energía que permitió dejar de utilizar 17 mil 430 GWH, equivalente a 38.8 millones de barriles de petróleo y evitando la emisión a la atmósfera de 23.6 millones de toneladas de bióxido de carbono.
El Horario de Verano inicia este fin de semana y es una medida que consiste en adelantar el reloj una hora, con el objeto de aprovechar mejor la luz solar en la tarde-noche.
Este ahorro de energía desde 1996 sería suficiente para alimentar 33.1 millones de focos incandescentes de 60 watts, operando todo el año, equivalentes a las ventas de energía eléctrica correspondiente al tercer trimestre de 2010 de los Estados de Chiapas, Durango, San Luis Potosí y el Distrito Federal.
La Comisión Nacional para el Uso Efectivo de la Energía dio a conocer el Horario de Verano que entra en funciones a partir del 3 abril genera importantes ahorro para el país y se recomienda a la población adelantar los relojes una hora, desde la noche del 2 de abril.
La aplicación del Horario de Verano tendrá una duración de siete meses por lo que concluirá el domingo 30 de octubre, con excepción de los municipios ubicados en la franja fronteriza norte, de conformidad con lo estipulado en la reforma al Decreto por el que se establece el horario estacional que aplica en los Estados Unidos Mexicanos, publicada el 6 de enero de 2010.
Para estos municipios fronterizos, el Horario de Verano tendrá una duración de ocho meses y concluirá el domingo 6 de noviembre de 2011.
Este programa es parte del conjunto de medidas que requieren la participación, tanto del Gobierno como de la sociedad, las cuales están orientadas a desarrollar una nueva cultura del ahorro y uso eficiente de la energía.
Milenio
