El dirigente de la Coordinadora Oaxaqueña de Organizaciones Campesinas (COCO), Donato Quiroz Cortés, arremetió contra su partido el Revolucionario Institucional, al cuestionar que nuevamente se están dando imposiciones de candidaturas, que lejos de beneficiar perjudican a la militancia.
Lo anterior tras la designación Carmelita Ricárdez Vela como dirigente del partido, de quien aseguró era la menos indicada para dirigir al instituto político en Oaxaca, toda vez que no tiene una visión política, “a la señora le falta mucho, no era la indicada para el cargo” dijo Quiroz.
Fue aún más crítico al manifestar que el tricolor ha perdido fuerza y mucho peor, se encuentra “despedazado” y sin un gramo de la unidad que lo distinguía y que logró durante mucho tiempo en que la población dio su confianza a las y los candidatos priistas.
Quiroz Cortés manifestó que el declive del Revolucionario Institucional, se ha gestado desde la llegada a la dirigencia de Adolfo Toledo Infanzón, Jorge Fernando Franco Vargas y ahora con Carmelita Ricárdez Vela, quienes en conjunto no han hecho más que poner en entredicho el trabajo serio del Revolucionario Institucional en la entidad oaxaqueña
“Carmelita no es factor de unidad, todo lo contrario, además no creemos que sea la indicada para el puesto, porque si no pudo con el Registro Civil, menos podrá con un PRI que ha sido saqueado y que se encuentra en condiciones urgentes de unidad y trabajo político”.
Por dicha razón planteó la necesidad de convocar a un Concejo Político, para elegir a alguien que le dé rumbo al PRI, con capacidades suficientes que no permitan que se deje engañar por el “canto de las sirenas”, ni se rija por el compadrazgo y el amiguismo que sólo pone en riesgo al partido.
Detalló que el tricolor ha perdido con ese tipo de acciones a sus bastiones más importantes, como lo son las organizaciones sociales y el campesinado, puesto que no se cansan de querer engañar a la militancia de que las designaciones son consensadas y con el apoyo de cientos o miles de simpatizantes, cuando la mayoría sabe que no es así.
Por último el dirigente campesino aseveró que es hora de que el PRI se convierta en un partido abierto y no de puertas cerradas, donde se tome en cuenta a la militancia y no se tomen decisiones que lejos de beneficiar la unidad del partido, lo único que hacen es despedazar lo ya fracturado.
Agencia JM