El escándalo por el que atraviesa la armadora alemana Volkswagen en Estados Unidos, por colocar un software que altera el control de emisiones de los motores a diésel de cinco de sus modelos, podría afectar a la planta de Puebla, donde se producen tres de los cinco modelos implicados.
La Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA, por sus siglas en inglés) dio a conocer el 18 de septiembre que las marcas Volkswagen y Audimanufacturaron e instalaron un software para manipular las emisiones emitidas por los motores de hasta 882,000 vehículos Jetta, Beetle, Audi 3, Golf y Passat, equipados con motores a diésel de dos litros y comercializados entre 2009 y 2015.
Parte de los modelos Beetle, Golf y Jetta implicados fueron suministrados desde la planta de Puebla en México. El Beetle, por ejemplo, sólo se produce a nivel mundial en esta locación para todo el mundo.
Tan sólo en 2014 la planta de Puebla ensambló 475,121 unidades, de las cuales 206,100 se enviaron al mercado estadounidense. De estos modelos alrededor de 41,200 fueron Golf, Jetta y Beettle con motorización a diésel, según datos de la compañía y de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA).
El gobernador del Estado de Puebla, Rafael Moreno Valle, dijo este martes que se reunirá con directivos de la empresa alemana para conocer las repercusiones que este problema ocasionará en la planta de Puebla.
“Podríamos esperar una baja en la producción y quizáalgunos despidos para el próximo año”, previó el Director de la Carrera de Negocios Internacionales del Tecnológico de Monterrey, Manuel Valencia. “Todo dependerá del impacto que este escándalo tenga en las ventas de la armadora en Estados Unidos”, añadió.
Volkswagen vendió 599,700 unidades en Estados Unidos en 2014, y los modelos TDI (a diésel) representaron entre 20% y 25% del total, según el reporte anual de la firma.
Cynthia Giles, agente de la autoridad en la EPA, dijo el viernes pasado que los vehículos en cuestión “contienen un software que desactiva los controles de emisiones durante la conducción normal y que los enciende cuando el coche está pasando por una prueba de emisiones”.
De acuerdo al medio alemán Handelsblatt, el modelo del motor que tienen los autos involucrados es el EA 189, el cual se fabricó principalmente en las plantas de Volkswagen de Hungría y Polonia.
Durante pruebas realizadas por investigadores de la Universidad de Virginia Occidental se detectó que en estos motores había un dispositivo que ‘enmascara’ el verdadero nivel de emisiones de los motores a diésel pues en condiciones normales estos emitían 40 veces el nivel de contaminantes permitidos por las normas de la EPA, dijo Giles.
Debido a esto el organismo estadounidense giró el fin de semana una orden de suspensión de la venta de los modelos 2015 y se negó a certificar que los modelos 2016 cumplen con las normas de emisiones.
“Esto será un inhibidor para las ventas de la armadora pues los consumidores estadounidenses no se arriesgarán a comprar un vehículo que no cumple con las normas ambientales y que no pasarán los controles ambientales”, dijo Valencia.
CNNExpansión buscó a los voceros de Volkswagen que a través de un comunicado aseguraron que “el software en cuestión no afecta el manejo” de los vehículos.
Volkswagen tiene una participación de 2% en el mercado estadounidense y había tratado atraer a los consumidores con la promoción de los motores diésel “limpios” que se suponía eran más eficientes y menos contaminantes que los motores de gasolina.
CNN México