Los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO) a través de la Dirección de Regulación y Fomento Sanitario y la Unidad de Salud Ambiental, entregaron constancias a diez talleres de alfareros provenientes de Santa María Atzompa, que cumplieron con la Norma Oficial Mexicana NOM-231-SSA1-2002, Artículos de alfarería vidriada, cerámica y porcelana, como libres de plomo.
La directora de la institución, Claudia Rodríguez Cortés señaló que con la finalidad de proteger de la exposición al óxido de plomo a los alfareros, sus familias y la población usuaria de loza vidriada destinada a preparar, servir y almacenar alimentos, los SSO cumplen con la estrategia establecida en toda la República Mexicana, mediante acciones de capacitación y fomento sanitario.
Las constancias fueron entregadas a: Bertha Dolores Zárate Blanco, Matea Rosario Ortiz Guerrero, Rolando Justino Porras, Ángel García Aquino, Socorro Aquino Pacheco, Angélica Vásquez Cruz, Rogelio León Hernández, Mateo Hernández Santiago, Guillermo Enríquez Chávez, y Juan Hernández Santiago.
En su intervención, la líder estatal del proyecto Loza vidriada libre de plomo, Irma del Socorro Sotelo Ortiz, detalló que en el país existen más de diez mil alfareros que se dedican a la producción de utensilios como ollas, cazuelas, jarros, vajillas, chirmoleras, juguetes, así como otros artículos y en Oaxaca se cuenta con 350 talleres.
Recordó que en 1996 en la entidad inició la investigación en la que se tomaron 420 muestras de sangre a los artesanos, lo que permitió detectar niveles de plomo muy por arriba de lo permitido por la Norma Oficial, por lo que entraron a un proceso de desintoxicación a base de una dieta rica en hierro, calcio, y vitamina C. Además de cambiar la greta por esmalte que en esa época estaba utilizándose ya sin plomo.
Entre el 2001 y el 2006, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), contempla dentro de su programa de salud ambiental, ocupacional, el retiro de óxido de plomo del proceso de producción en los estados de Guanajuato, Ciudad de México, Guerrero, Jalisco, Michoacán, Oaxaca, Morelos y Puebla, por lo que se hizo una campaña de comunicación de riesgos.
Y en 2001, se le informó a la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac), que a partir de ese año sería un programa permanente para evitar que los restaurantes y lugares que venden alimentos utilicen la loza vidriada con plomo.
Sotelo Ortiz dijo que en 2008, 2009 y 2010 se hicieron semanas de salud con el objetivo de concienciar a las y los artesanos sobre los daños ocasionados a su salud por el uso del óxido de plomo, ya que está demostrado que ocasiona enfermedades en el riñón, anemia, esterilidad, saturnismo, retraso de crecimiento en niñas y niños, problemas de conducta y audición, dolores de cabeza, abdominales, cansancio y falta de apetito, entre otros.
La funcionaria exhortó a los demás artesanos para que se unan a este programa que tiene como objetivo reducir los riesgos a la salud, evitando la contaminación de alimentos y bebidas por este metal, cambiando el esmalte.
Cabe destacar que durante la ceremonia estuvieron presentes, la jefa de la Unidad de Salud Ambiental, Marcela Linares García; así como la jefa del Departamento de Salud Ambiental, María Moreno Cruz y el encargado de la Coordinación de Regulación y Fomento Sanitario de la Jurisdicción Sanitaria de Valles Centrales, Ángel Alfonso Quintero Martínez.