El Secretario de Seguridad Pública en el Estado, Marco Tulio López Escamilla que se negó rotundamente a hablar del secuestro de dos menores, hijos del empresario Juan José Álvarez Candiani ocurrido el pasado lunes, solo se limitó a cerrar la boca en señal de silencio.
Asimismo, haciendo señales afirmativas y negativas con la cabeza, solo asentó a señalar afirmativamente que se investigan todas las posibles líneas, incluyendo las de tipo ideológico.
Y es que al preguntársele sobre la posibilidad de que el secuestro sea de tipo ideológico o tenga alguna implicación el crimen organizado, el funcionario solo hizo señales de que se investigan todas esas posibilidades.
Aunque de la misma manera rechazó seguir contestando a las preguntas del reportero quien insistentemente trataba de hacerlo hablar.
Más adelante, dijo que por decisión y respeto a la familia no se hablaría del tema y desvió las preguntas para hablar sobre las medidas de seguridad que se estarían reforzando en toda la ciudad de Oaxaca.
Destacó que cada oaxaqueño debe ser responsable de su seguridad, tomando todas las precauciones necesarias al salir y llegar a su domicilio para evitar sorpresas y riesgos.
Agencia JM
