La Cámara de Representantes votó hoy el proyecto de ley para implementar nuevos procedimientos de control sobre los refugiados de Siria en busca de reasentamiento.
El proyecto amenazan con enturbiar la política de Medio Oriente del Presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y que se argumentan por el temor generalizado tras los atentados de París del viernes pasado.
El proyecto de ley, que fue aprobado con 289 votos a favor y 137 en contra, requerirá que el director de la Oficina Federal de Investigaciones, el Secretario del Departamento de Seguridad Nacional y el director la Inteligencia Nacional confirmen que cada solicitante procedente de Siria e Irak no representa ninguna amenaza, una demanda que la Casa Blanca calificó de insostenible.
La medida fue apoyada por 50 demócratas en la votación, incluso después de que funcionarios de la Administración les imploraran abandonar la medida esta mañana.
“Nuestro deber es proteger al pueblo estadounidense”, dijo el representante de California Kevin McCarthy, quien afirmó que la nueva medida aumenta las normas para controlar a los que quieren hacer daño a Estados Unidos.
La popularidad de la medida en el Congreso se produce luego del rechazo a la petición de Obama de una autorización explícita del uso de la fuerza contra el grupo autodenominado Estado Islámico (EI).
La Casa Blanca, en su promesa por vetar el proyecto de ley, dijo en varias ocasiones que la medida afectaría al liderazgo de los Estados Unidos y perjudicaría la capacidad de Washington para comandar una coalición contra las amenazas de seguridad en Siria.
Obama criticó a los miembros del Congreso y los precandidatos presidenciales por menospreciar sus preocupaciones, arremetiendo contra ellos por ser insensibles y condenó la sugerencia de que solamente a los refugiados cristianos, y no los musulmanes, se les permitiría entrar en el país.
Denis McDonough, el jefe de staff de la Casa Blanca, y el Secretario de Seguridad Nacional, Jeh Johnson, corrieron al Capitolio para hablar con los representantes demócratas, que admitieron estar cada vez más preocupados por las políticas centradas en votar en contra de la medida.
Tras una reunión hoy con Justin Trudeau, el nuevo Primer Ministro de Canadá, Obama insistió en que los refugiados fueron sometidos al proceso de selección más riguroso que tienen para admitir a personas.
Añadió que el proceso de selección de un refugiado potencial puede durar hasta dos años e incluye la verificación de antecedentes por el centro nacional de lucha contra el terrorismo, el FBI y el Departamento de Defensa.
Asimismo, aseguró que no representan una mayor amenaza que todos los turistas que visitan Estados Unidos todos los días.
El Secretario de Prensa del Presidente, John Earnest, facilitó más detalles sobre el proceso de selección de los refugiados y explicó que los solicitantes de asilo son sometidos a verificaciones sobre sus antecedentes que recopilan información biográfica y biométrica, y que deben pasar además una entrevista personal.
Muchos demócratas trataron de apoyar a Obama y su programa en el pleno de la Cámara, como el representante de Michigan, John Conyers, quien dijo que hay que tener en cuenta que la nación fue fundada por inmigrantes y acogió históricamente a los refugiados cuando había más sufrimiento en el mundo.
“En vez de cerrar nuestras puertas a estos hombres desesperados, mujeres y niños que están arriesgando sus vidas para escapar de la muerte y la tortura en sus países de origen, debemos trabajar para utilizar nuestros inmensos recursos y las buenas intenciones de nuestros ciudadanos para darles la bienvenida”, añadió.
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