Una cardiopatía congénita les ha quitado el aliento. Las esperanzas se mantienen, pero desfallecen cada vez que la respuesta es negativa. En la cama 5 del Hospital de la Niñez Oaxaqueña “Dr. Guillermo Zárate Mijangos”, Eliel se debate entre la vida y la muerte.
Las arterias de su corazón se encuentran inversas, una de estas está tapada y tiene dos perforaciones en este órgano, por lo que su estado a salud es grave y requiere de una intervención quirúrgica de inmediato.
Aunque su madre Bianca Lleralyt López Soriano de unos 28 años ha hecho hasta lo imposible por salvar a su único hijo, la falta de sensibilidad y buenas “palancas” mantienen a Eliel sin una oportunidad.
Entre las frías paredes del Hospital de la Niñez Oaxaqueña “Dr. Guillermo Zárate” (HNO), las esperanzas de la mamá del bebé se mantienen. Ella dejó su comunidad de Arroyo Súchil en Santa María Huatulco en la Costa de Oaxaca a más de siete horas de la capital para buscar ayuda para el bebé quien prácticamente vive por un “milagro”.
“Yo, le pido misericordia a Dios y al gobernador Alejandro Murat, si yo tuviera los medios, si yo tuviera los contactos hubiera ya operado a mi hijo”, señaló la mujer que proveniente de una familia humilde.
Una semana después del 8 de Junio nada volvió hacer igual para esta familia, Eliel ya no comía y su respiración era cada vez más agitada ante ello lo trasladaron a la clínica de la población y después al Hospital Regional de Huatulco en donde los doctores aseguraron que se trataba de un problema cardiaco pero menor y que era normal.
Ahí estuvo hospitalizado una semana, gracias a la ayuda de los familiares y conocidos de Bianca el menor logró ser trasladado al HNO, sin embargo, se mantiene en espera a un espacio en loa tres nosocomios que podrían salvarle la vida.
Pero en el Instituto Nacional de Cardiología, el Instituto Nacional de Pediatría o el Hospital General Federico Gómez no hay espacios y aunque acudieron con los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO), éstos sólo han manifestado que corresponde a la trabajadora buscar un espacio en los nosocomios de la Ciudad de México y que no se puede hacer más.
Carina García
