Humberto Moreira, prácticamente único aspirante a dirigir el PRI, asegura que su partido dejará de poner la otra mejilla ante las críticas y advirtió que quienes busquen denostar al partido “están a punto de meterse al callejón de los trancazos”.
Como presidente del PRI promete un estilo distinto con respecto a su antecesora Beatriz Paredes; asegura que será un partido más reactivo y que no se dejará.
En entrevista con MILENIO, dijo que malabarea con el trabajo de gobierno, que aún no termina —pedirá licencia a la gubernatura de Coahuila el próximo 3 de enero.
Después de casi 10 años en los que el partido no tuvo una candidatura de unidad para su dirigencia, Moreira hace un balance y asegura que el control y equilibrio se consiguió con la labor de gobernantes priistas, además de las fuerzas en el Senado y la Cámara de Diputados.
¿Cuánto influyeron gobernadores?
Creo que influyó su decisión, sí, pero también los senadores y diputados federales. Fue un trabajo de estar hablando con todos y hay una conciencia clara del priismo que tenemos que llegar unidos. Nadie está empujando la división, tenemos que empujar hacia la unidad. Eso ayudó.
¿Los gobernadores son el verdadero poder del partido?
Te lo dice alguien que está trabajando como gobernador. No nada más los gobernadores, sí, es cierto que tenemos una participación importante, vemos las encuestas y estamos a la cabeza con los mejores resultados, pero también el Senado tiene muchas cosas que ver, la Cámara de Diputados tiene mucho que ver y la presidencia del partido. Yo creo que no puedo etiquetar a un sector de priistas o a un grupo, creo que estamos en sintonía.
Hemos visto cómo le fue al país al no gobernar el PRI y ahora hay más pobres, hay más violencia, menos oportunidades, esas inconformidades van generando interés de fortalecer el partido. ¿Te acuerdas del cuento de Caperucita? Estas orejas más grandes son para oír mejor. Yo tengo que escuchar a todos.
En sus oficinas de Saltillo recibe llamadas en su teléfono particular, una de Enrique Peña Nieto y otra más de Manlio Fabio Beltrones; estamos unidos todos, presume.
“Es lo que piden los comités, la gente de los estados: nomás por favor, que no nos peleemos. Creo que esa lección ya la tenemos aprendida”, asegura.
Apela a conservar la unidad e incluso abre la puerta a quienes abandonaron el partido o bien, dejaron de lado las tareas, con la condición de que su participación, esta vez, sea con lealtad.
¿Quien quiera puede regresar al partido?
Es un partido de puertas abiertas. Es un partido que tiene claridad de que hay que ver hacia adelante. No hay que ver hacia atrás porque nos convertimos en estatuas de sal.
Moreira también evalúa los retos del partido y asegura que aunque respeta la gestión de Beatriz Paredes, adelanta que la diferencia de la dirección será con “estilos distintos”.
Admite que el suyo en ocasiones “sacude algunas conciencias”, pero advierte:
“Tendremos un partido sin dejarnos. Aquí no vamos a poner la otra mejilla. Vamos a dejar las cosas claras, no queremos estar en la riña política, nunca he iniciado una pelea en mi vida. Bueno sí, una vez la inicié de joven y me fue muy mal, y de ahí entendí que nunca más debo iniciar una pelea, pero también, nunca me he quedado con los brazos cruzados.
Pero como nos den les damos. No vamos a iniciar ninguna pelea, vamos a trabajar todos los días sin perder el tiempo para construir el proyecto de nación que queremos. Pero cuando estén fregando les vamos a dar una aplacada.
¿Le faltó defensa al partido?
Llegamos a confiar que estábamos madurando como país. Pero no vamos a permitir que nos difamen calumnien, lesionen, y no hacer nada. Mi llegada al partido tiene que ver con un dirigente que busca trabajar intensamente para construir alianza con la sociedad.
¿Va a haber un partido más reactivo con el gobierno federal, con el PAN?
Que no se deje.
¿Se dejó mucho?
No, no, no, mi actitud es así, es una posición que tenemos clara y defendemos lo que es nuestro, no
vamos a estar en la riña, pero
no nos vamos a dejar.
No quiero decir que me voy a dedicar horas a pelear, pero basta con dos minutos para contestar cualquier calumnia o difamación, aplacar a los adversarios.
¿No se expone al partido ?
Si vamos a tener la lengua larga hay que tener la cola corta. Si ellos tienen la lengua larga, que chequen como tienen la cola. Si la tienen corta van a entrar y van a salir bien librados, si no se meten al callejón de los trancazos.
El coahuilense también habla de su papel en la selección de candidato para 2011. Admite que hay poco tiempo desde la toma de posesión de su partido hasta la selección del candidato presidencial que se hará a finales del siguiente año.
Sin embargo, tiene definidos los calendarios: “En 16 meses estaremos llegando a la Presidencia”.
¿Llega al partido para impulsar la candidatura de Peña Nieto?
El que llega al partido tiene que ser totalmente imparcial y yo creo que si se han sumado voluntades a mi favor es porque saben que voy a trabajar para consolidar la estructura, para buscar la unidad y construir el proyecto político de todos los mexicanos, soy amigo de Enrique Peña Nieto y soy amigo de Manlio Fabio Beltrones y soy amigo de Beatriz Paredes. Aún no es el momento de que alguien levante la mano para eso.
¿Su relación con Elba Esther Gordillo?
Es muy amiga mía. Creo que también es amiga del PRD, al menos de Marcelo (Ebrard); creo que el presidente (Felipe Calderón) debe considerarla una amiga.
Milenio