El placebo: Alejandro Leyva Aguilar

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-Y ustedes se preguntarán ¿qué chingá es un placebo?

 

-Dicen los psicólogos que un placebo sirve para engañar a la mente, es decir es una pastilla que no tiene ningún medicamento pero que cura.

-la pastillita en cuestión no tiene medicina y es utilizada por los psicoanalistas para demostrar que quien cura las enfermedades, es la mente y no el activo médico.

-En otras palabras es “atole con el dedo”

-Hace unos minutos revisaba la cuenta de twitter de la Secretaria de Turismo Gloria Guevara Manzo que le mandaba un tw a gabino cué –así, con minúsculas- avisándole de la visita de Ann Obama a Oaxaca.

-La visita de la hija de Obama y 11 de sus mejores amigas a nuestras tierras, es considerado por la secretaría de turismo como un logro.

-Logro porque pudiendo ir a cualquier parte del mundo, prefirió venir a Oaxaca que es un estado pluriétnico y multicultural, pobre al extremo y estrangulado por marchas, plantones y un magisterio guerrillero.

-Pero es un placebo turístico.

-Podemos decir al mundo que los oaxaqueños nos sentimos orgullosos por que la hija de los Obama, tuvo a bien visitar nuestras paupérrimas tierras justamente en el equinoccio de primavera.

-Y que escogió Monte Albán, por encima de destinos turísticos importantísimos como Chichén Itzá o Palenque para recibir las bendiciones del nuevo periodo cósmico de las culturas prehispánicas.

-No importa que miles de turistas locales, nacionales e internacionales que año con año vienen a “recibir energía” en esta fecha de la entrada de la primavera, no podamos subir al cerro de Monte Albán cerrado en exclusiva para Ann Obama.

-¿Qué importa eso si una mortal, hija del mortal más poderoso del mundo, decidió visitar la muy jodida ciudad de Oaxaca sólo para recibir energía en Monte Albán?

-El gobierno dirá que Oaxaca es seguro porque la hija del hombre más poderoso sobre la faz de la tierra, la visitó y la mayoría de los oaxaqueños lo creeremos porque así funciona un placebo.