Una irlandesa que a los 13 años sufrió la agresión sexual de un sacerdote, y un argentino teólogo moral amigo del Papa están entre los ocho primeros integrantes de la Comisión para la Tutela de Menores que Francisco constituyó en diciembre para luchar contra los escándalos de abusos pederastas por parte de curas y otros miembros de la Iglesia. El pontífice los nombró ayer y se trata de cuatro hombres y cuatro mujeres que son “personas altamente cualificadas”, según afirmó el portavoz pontificio, padre Federico Lombardi.
El vocero dijo que Francisco “pone en claro que la Iglesia debe tener la protección de los menores entre sus prioridades más altas”.
Entre los miembros se encuentra también el cardenal arzobispo de Boston, Sean Patrick O’Malley, que es uno de los ocho purpurados que ayudan al Papa en el gobierno de la iglesia en el llamado “C8”.
O’Malley fue encargado de limpiar de una oleada de devastadores escándalos de pedofilia, cometidos por miembros del clero, la arquidiócesis de Boston, una de las principales de Estados Unidos, sobre todo por las coberturas para “evitar escándalos y cuidar el prestigio de la Iglesia”, que causaron un severo desprestigio a la Institución.
El predecesor de O’Malley, el cardenal Bernard Law, fue trasladado al Vaticano para evitarle problemas judiciales mayores por su inoperancia y coberturas frente a la acción de los curas pederastas.
De la comisión forma parte el director del Departamento de Teología Moral de la Universidad Gregoriana, principal ateneo mundial de los jesuitas, el argentino padre Humberto Yáñez, amigo personal del Papa.
Otro teólogo jesuita nombrado por Francisco es el alemán Hans Zollner, vicerrector de la Gregoriana, quien en 2012 organizó un seminario con obispos de todo el mundo para debatir las mejores prácticas para proteger a los niños. En esa conferencia, la irlandesa Marie Collins, contó su amarga experiencia de haber sufrido abusos sexuales a los 13 años por parte de un sacerdote, con serias consecuencias para su salud psíquica.
Collins contó que las autoridades eclesiásticas irlandesas no le creyeron cuando denunció a su agresor y la inculparon.
La comisión está integrada también por la psiquiatra francesa Catherine Bonnet; la ex premier polaca y experta en derechos humanos, Hanna Suchocka; la baronesa británica Sheila Collins, experta en salud mental, y el profesor de derecho canónico italiano Claudo Papale El portavoz padre Lombardi dijo que la comisión elaborará los nombres de ulteriores candidatos en otros continentes y países, que serán llamados a participar de la comisión.
“La comisión adoptará una aproximación multiple para promover la protección de los menores, que comprenderá la educación para prevenir la explotación de niños”, además de las mejores medidas penales y las “mejores prácticas” desarrolladas en la sociedad con los mismos objetivos.
La reputación de la Iglesia ha sufrido fuertes golpes a su prestigio por décadas de escándalos y una comisión de las Naciones Unidas acusó al Vaticano de encubrir a los curas pedófilos, cargo que la Santa Sede rechazó con vehemencias.
En una entrevista al Corriere della Sera a principios de este mes, Francisco dijo que los abusos eran “una vergüenza” y un espanto, pero señaló que se hacían también críticas injustas a la Iglesia, “que es la única institución pública que se movió con transparencia y responsabilidad”.
“Pese a ello, la Iglesia es la única que es atacada”, concluyó.
El Clarín