El gobernador de Nuevo León, Rodrigo Medina de la Cruz, consideró que los ataques a balazos y granadazos contra sedes policiacas este fin de semana son un mensaje del crimen organizado para “asustar” a las autoridades.
El sábado pasado fue atacado el cuartel de Seguridad Pública del estado con un artefacto explosivo que hirió a un policía, mientras este domingo el C-5 fue baleado por pistoleros que viajaban en un auto en movimiento.
Reiteró que estas acciones son una reacción al trabajo que lleva a cabo su administración en coordinación con las fuerzas armadas, tanto del Ejército mexicano como de la Policía Federal.
Estos ataques “no son gratuitos”, señaló Medina de la Cruz y reconoció que uno de los puntos a favor de las bandas delictivas es el factor sorpresa para perpetrar hechos violentos.
“No nos vamos a detener, ni nos asusta ni nos atormenta, al contrario, nos echa para adelante. Hay quienes dicen que el gobierno del estado no está haciendo nada, yo creo que estos ataques no son gratuitos”, afirmó.
“Estamos trabajando y la delincuencia no quiere que el gobierno trabaje tan intensamente, en coordinación con las fuerzas federales; sé que son momentos muy complejos y la delincuencia, entre otras cosas, tiene el elemento sorpresa de su lado, pero no nos vamos a detener”, dijo.
El mandatario confirmó que el ataque de este domingo contra del C-5 se realizó desde un vehículo en movimiento, aunque no hubo víctimas ni daños materiales.
“Son mensajes, son señales de los criminales que quieren, insisto, asustar a la autoridad, que no estemos trabajando ni echados para adelante, cosa que no van a lograr”, agregó.
El gobernador señaló que cuentan con imágenes de los vehículos utilizados en el ataque de este domingo y adelantó que se aplicarán operativos en lugares donde se lleven a cabo actos masivos para evitar ataques a la sociedad civil.
En tanto, un grupo de personas efectuó una manifestación en la calle Morelos, donde se colocaron veladoras en memoria de la joven Lucila Quintanilla Ocaña, víctima civil de una balacera en el centro de Monterrey la semana pasada.
Al alcalde de Monterrey, Fernando Larrazabal, le espetaron: “¡Si no puedes con el paquete, regrésate a Sudáfrica!”, en relación a su viaje en el Mundial de Futbol.
Milenio
