Una buena técnica de cepillado de dientes, lavarlos después de cada comida, al despertar y antes de dormir, así como el uso de hilo y enjuague bucal, previenen enfermedades bucales.
Ya que después de ingerir los alimentos se forma una capa de sarro en la boca, la cual daña el esmalte de los dientes, los debilita y los hace más propensos a desarrollar caries, mal olor y enfermedad periodontal.
Ante lo cual, los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO), exhortan a la población a realizar autoexploraciones y visitar al dentista por lo menos dos veces al año, ya que ello garantiza una buena higiene y salud bucodental.
La coordinadora Estatal de Estomatología de la institución, Adelina Piñón López, informó que los SSO cuentan con 500 odontólogos, cubriendo 315 unidades médicas en las seis Jurisdicciones Sanitarias del estado, los cuales han otorgado 193 mil 202 consultas de enero a junio del presente año.
Detalló que se atendió a la población con 28 mil 944 amalgamas, 29 mil 820 aplicaciones de resinas, 26 mil 314 extracciones (temporales y permanentes), 40 mil 280 profilaxis, 64 mil 932 sesiones de salud bucal, así como capacitaciones sobre medidas preventivas.
Señaló que durante la administración del Gobernador, Gabino Cué Monteagudo y el encargado del despacho de los SSO, Héctor González Hernández, se han reforzado las estrategias de prevención con el objetivo de promover, conservar y restaurar la salud bucal de la población, principalmente la de mayor riesgo como lo son los escolares, las embarazadas y los adultos mayores.
Advirtió que el cepillado correcto no toma, al menos, dos minutos (120 segundos), se debe, usar movimientos cortos y suaves, prestando especial atención a la línea de la encía, los dientes posteriores de difícil acceso y las zonas alrededor de obturaciones, coronas y otras reparaciones.
Explicó que la técnica adecuada consiste en limpiar las superficies externas e internas de las piezas dentales superiores, de arriba hacia abajo y luego las de los dientes inferiores de abajo hacia arriba, las áreas de masticación en forma de círculos y cepillar la lengua.
La funcionaria agregó que es recomendable utilizar un cepillo de cerdas suaves y de cabeza pequeña, ya que es ideal para eliminar la placa y los restos alimenticios, además llega mejor a todas las zonas de la boca, aun en los dientes posteriores de difícil acceso.
Asimismo dijo que los cepillos dentales se deben remplazar cuando den señales de desgaste o cada tres meses, también es importante cambiarlos después de un resfriado, puesto que las cerdas acumulan gérmenes que pueden provocar una nueva infección.
Piñón López, indicó que es importante cuidar y enseñarles a los niños desde tempranas edades los hábitos de higiene bucal, incluso cuando aún tienen dientes de leche, a fin de evitar daños en las piezas dentales y en la salud en general de los infantes. “el cuidado dental es un hábito que se aprende desde la infancia y que perdura toda la vida”, concluyó.