El infierno: Luis Murat

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El Valle del Mezquital es una zona de las más pobres del país. Árido, pero rico también en manantiales termales y templados. El Valle del Mezquital es la región más extensa del estado de Hidalgo. Está habitado por 20 mil personas, mayormente indígenas otomís dedicados a la agricultura, como actividad principal.

El Valle del Mezquital ha tenido modificaciones territoriales debido a la introducción de canales de riego usados para la agricultura y la industria y a la densidad de la población, como sucede en Tlahuelilpan.

La Cuenca del Rio Tula, en consecuencia, ha sido la más afectada al ser receptora de aguas residuales que provienen de la Zona Metropolitana del Valle de México; descargas que causan que el Tula, el Tepeji, el Salado, El salto y el Alfajayucan sean los ríos más contaminados del estado de Hidalgo.

Las descargas contaminantes en los ríos contienen desechos orgánicos, metales, bacterias y detergentes, incluso, la Presa Endhó está contaminada a causa de las descargas de aguas residuales provenientes de la Zona metropolitana del Valle de México.

No obstante, el uso de aguas residuales han hecho que la agricultura en el Valle del Mezquital sea la actividad económica más importante, pero que causante de la deforestación en montes y valles poblados de arboles de oyamel y pinos.

El Mezquital es uno de los territorios más pobres del país. Gobiernos van y gobiernos vienen sin que el estado de Hidalgo supere la pobreza en el Valle del Mezquital. Miseria que se traduce en ignorancia, en poca educación y falta de oportunidades.

De esta forma, el futuro para las generaciones que nacen y mueren en este entorno es el dedicarse a la agricultura o marcharse a otros sitios en busca de mejores oportunidades.

En esa realidad centenaria, difícil y dramática de los pobres del Valle del Mezquital esta situado Tlahuelilpan, que en ultimas fechas es conocido por que parte de la población se dedicó a una actividad ilegal y peligrosa: la ordeña de ductos de gasolina.

La frase, “Te llenan el tanque hasta tu casa”, es famosa en Tlahuelilpan, que al igual que Mixquiahuala, Tezontepec, y Tlaxcoapan, el huachicol se multiplicó ocasionando, al mismo tiempo, que la violencia y la inseguridad creciera en el Valle del Mezquital.

La actividad ilegal del huachicol, tolerada o ignorada por 20 años, en los tres gobiernos presidenciales anteriores, ha cobrado dramática, terrible y mortal factura a las familias de Tlahuelilpan, cuando el viernes por la tarde, cientos de personas acudieron a llenar bidones, cubetas y recipientes de la gasolina que, como géiser islandes, brotaba de un ducto perforado de Pemex.

Más de 600 personas, incluidas mujeres y niños, se empapaban del combustible cuando de pronto se produjo un estallido que convirtió al sembradío en un infierno que dejó a decenas de personas muertas y heridas de gravedad. La cifra precisa de muertos y heridos todavía no es exacta.

Las escenas trasmitidas son dantescas, personas convertidas en antorchas humanas, corriendo y gritando pidiendo auxilio; escenas que nos hacen recordar aquella fotografía histórica del fotógrafo Nick Ut tomada a la niña vietnamita, Phan Thị Kim Phúc, corriendo desnuda y horrorizada envuelta en llamas por una carretera, a causa de una bomba de napalm arrojada por un avión de combate de Estados Unidos.

El sembradío era un caos, pues el diablo se había apoderado de la situación.

Acudieron al lugar de la tragedia los titulares de las instituciones de Marina, Seguridad, Pemex y Defensa, pero no se sabía nada; todo eran especulaciones y suposiciones. Unicamente, el protagonismo apareció con interminables declaraciones a los medios del gobernador del estado, el de la Secretaría de Seguridad, y las carcajadas de Chencho, como llaman sus amigos al Secretario de la Defensa, que fueron grabadas por la televisión, en las que se pueden observar las alegres imágenes del general secretario.

Infierno de Dante causado por múltiples causas como la pobreza y la ignorancia de la población del Mezquital, al no saber o no aceptar, que el manejo de combustibles es mortal, como sucedió en Tlahuelilpan aquel viernes trágico que vistió de luto al Estado de Hidalgo.

@luis_murat