El santo padre atribuyó al diablo el destape de múltiples casos de curas pederastas. Por ello, pidió a obispos ser humildes
El papa Francisco atribuyó al “gran acusador” o demonio, la difusión de casos de curas pederastas y aseguró, lo hace para escandalizar al pueblo.
Desde la capilla del Vaticano, el sumo pontífice presumió que “el gran acusador anda suelto y se las trae con los obispos”, mismos que no son los únicos pecadores, ya que “todos lo somos”.
Aludiendo al libro bíblico de Job en el que el demonio es presentado como el gran acusador porque va por el mundo buscando víctimas, el papa pidió a los clérigos ser humildes y permanecer cerca del pueblo.
Una vida lejos de la aristocracia los hará tener un escudo ante “las acusaciones del maligno”, expresó.
Fuente: lopezdoriga.com