Luego de días que parecieron horas, el presidente López Obrador aclaró el sentido de su señalamiento sobre un “golpe de Estado” en su conferencia mañanera de ayer lunes: entre el pueblo que lo apoya se encuentra el ejército. Y no era para menos esa aclaración porque el ejército como institución y los militares en activo son pueblo.
La precisión fue pertinente porque el ejército es el pilar de estabilidad del gobierno lopezobradorista, es pieza fundamental de la estrategia de seguridad y le han asignado tareas tan importantes como la construcción del aeropuerto civil internacional de Santa Lucía.
En este contexto, cuando menos tres encuestas confirman el papel clave del ejército en la estabilidad nacional:
1.- Una encuesta de Consulta Mitofsky levantada después de la crisis del hijo de El Chapoen Culiacán reveló una opinión buena y regular de 88.9% a nivel nacional y de 85.3% en Sinaloa a favor del ejército. Y el grado de confianza de los ciudadanos en los militares en escala de 1 a 10 fue de 77.1% en nivel alto de 0 a 10 y de 14.7% a nivel medio de 5 a 7 a nivel nacional y de 66% y 21.3% respectivamente en Sinaloa. La calificación consolidada fue de 8.3% en la república y de 7.78 en Sinaloa.
–A nivel nacional, en la misma encuesta posterior al operativo en Culiacán, 82% dijo a nivel nacional que es correcta la utilización del ejército en labores de combate al crimen organizado y de 82.6% a nivel de Sinaloa. En términos generales, el 82.7% a nivel nacional dijo que tenia sensación de seguridad, tranquilidad y alivio con los militares en labores sociales y el 84.2% a nivel de Sinaloa.
Sobre el operativo en Sinaloa contra uno de los hijos de El Chapo, la encuesta arrojó datos interesantes:
–55.3% a nivel nacional afirmó que el gobierno hizo bien en liberar al capo y a nivel de Sinaloa el apoyo a la decisión gubernamental subió a 71.4%.
–Una de las preguntas fue diferente: ¿qué hubieran hecho los ciudadanos si hubieran estado en posición de decidir? A nivel nacional el 56% dijo que liberarlo para evitar muertes civiles y el 69.7% a nivel de Sinaloa dijo que también liberarlo.
–El 68.1% de encuestados a nivel nacional y el 73% de sinaloenses aceptaron que los criminales si hubieran cumplido su amenaza de matar civiles.
–En el delicado tema de negociar o no con organizaciones delictivas, el 41% a nivel nacional y el 56.6% a nivel estatal dijeron que sí se debe negociar en condiciones especiales. A nivel nacional el no negociar fue mayor: 47.6%.
–En la calificación de comportamientos, el 51.8% a nivel nacional y el 56.1 a nivel Sinaloa dijeron que el presidente López Obrador había hecho decidido bien; y respecto al ejército, el 58.6% a nivel nacional y 52.3% a nivel Sinaloa apoyaron al ejército.
–A partir de la parte fallida del operativo, el 53% de encuestados a nivel nacional y el 54% a nivel Sinaloa afirmaron que debe modificarse la estrategia de seguridad porque no está dando buenos resultados.
–El 49.6% de mexicanos a nivel nacional y el 56.8% a nivel de Sinaloa refirmaron que el objetivo de la estrategia de seguridad, como lo señala el modelo presidencial, debe evitarla pérdida de vidas humanas.
2.- Otra reciente encuesta de la empresa Consulta Mitofsky sobre la confianza en las instituciones en 2019 arrojó datos sobresalientes:
–El ejército ocupa el segundo lugar en confianza con 7.0 de calificación después de las universidades, empatado con la imagen presidencial. En 2018 el ejército calificó 7, en tanto que la presidencia de Peña Nieto quedó en lugar 16 con 5.1, lo que quiere decir que López Obrador hizo subir la institución presidencial 1.9 puntos para situarla en un empate en segundo sitio con 7 con los militares.
3.-Y la última Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana del INEGI (10 de octubre de 2019) colocó a las fuerzas armadas como las instituciones más confiables en materia de seguridad: 86.1% para la Marina-Armada de México y 83.2% para el ejército, contra 63.6 para la policía federal, 50.6% para las policías estatales y apenas 41.7 para las policías municipales.
En estas tres encuestas se revela el alto grado de aceptación social de las fuerzas armadas a nivel nacional y también estatal en Sinaloa.
Durazo en el Senado. Después de su posición beligerante con los diputados y luego de los sacudimientos que provocaron los tuits presidenciales sobre un “golpe de Estado”, el secretario federal de Seguridad y Protección Ciudadana, Alfonso Durazo Montaño, tiene la tarea política hoy –si se confirma su comparecencia en el Senado– de reconstruir el consenso político y social de la estrategia de seguridad que salió desportillada en Culiacán. Le ayudará el papel político conciliador del jefe de la Junta de Coordinación Ricardo Monreal Avila, pero Durazo tendrá que hacer el esfuerzo de reconstrucción de alianzas. En Senado es clave en el apoyo institucional a la estrategia de seguridad.
Política para dummies: La política se nutre de las percepciones de la sociedad.