
Diana Mendez
Un ataque armado registrado la mañana de este lunes en el estacionamiento de Plaza Pabellón dejó sin vida al dirigente de la Confederación Autónoma de Trabajadores y Empleados de México (CATEM), Noé Pérez Urquidi, en un hecho que volvió a encender las alertas por la creciente violencia en el puerto.
De acuerdo con versiones preliminares, el dirigente sindical salía del restaurante Toks cuando fue sorprendido por un sujeto armado que le disparó a quemarropa antes de escapar del lugar. A pesar de la rápida movilización de cuerpos de emergencia, Pérez Urquidi ya no contaba con signos vitales.
Elementos de la Guardia Nacional y de la Policía Municipal arribaron al sitio y aseguraron el área, mientras se implementaba un operativo para ubicar al responsable, sin que hasta ahora se reporte alguna detención.
Momentos después, familiares y compañeros de la CATEM acudieron al lugar para confirmar la identidad del dirigente y condenar el asesinato, calificándolo como un golpe al movimiento sindical en la región.
Las autoridades de justicia del estado iniciaron las investigaciones correspondientes para esclarecer el crimen y determinar los motivos del ataque. Este hecho se suma a otros episodios violentos ocurridos recientemente en el Istmo de Tehuantepec, una región que continúa marcada por la inseguridad y la impunidad.







