La explosión que desde hace tiempo ha tenido la tecnología de impresión en 3D, ha logrado impactar cada vez a más sectores; desde medicina y arquitectura, hasta la industria de los juguetes y la moda.Prueba de esto último, fue la prenda usada por Dita von Teese en un evento en Nueva York el pasado lunes.
Un vestido cuya mayor particularidad, es que es el primero en haber sido fabricado enteramente por una impresora 3D.
La pieza fue creada por los diseñadores Michael Schmidt y Francis Bitonti, quienes, debido a que viven en lados opuestos del país, tuvieron que organizar el proyecto a distancia y de forma digital.
En primer lugar, el vestido fue diseñado de un iPad, se afinaron detalles vía Skype y luego se rendereó el modelo, para finalmente enviarlo a la compañía Shapeways que se encargó de la impresión.
El vestido está inspirado en la secuencia de números Fibonacci y fue diseñado con el software maya y luego con Rhino, programa en el que se detallaron 2,633 enlaces independientes que forman el cuerpo de la prenda.
Todo fue creado con una impresora EOS P350 que fabricó 17 piezas distintas, las cuales fueron ensambladas a mano y a las que se añadieron 13 mil cristales Swarovski.Un increíble trabajo que más allá de la parte tecnológica e industrial, llama la atención por su estética y claro, también por la espectacular y riquísma figura que presume la señorita von Teese.
Agencias