Los rayos del sol daban justo en la cara lateral del recinto legislativo en San Raymundo Jalpan, lugar en donde los diputados y diputadas no escuchan, no legislan y no asisten a cumplir con sus obligaciones.
Ingresar a este lugar se ha convertido para no muy pocos en un trámite burocrático; credenciales, registros, procedencia y un sin fin de requisitos más.
La apariencia de la piel cambia con los rayos intensos del sol; uno, dos, tres, cuatro y decenas de maestros llegan hasta el acceso principal de este lugar dónde sólo existen para los guardias de seguridad y los reporteros.
Los demás y las demás se pierden en sus charlas sobre los aspirantes punteros para este proceso electoral; unas más presumiendo sus bolsas y zapatos de marca.
A través de un megáfono y un aparato de sonido, los maestros y maestras se desgastaban para exigir la armonización de la ley estatal de educación con su propuesta emanada de los 37 foros realizados en las ocho regiones de la entidad.
Sin embargo, nadie los escuchó, nadie los atendió; después de más de tres horas de asolearse los maestros se retiraron uno a uno para continuar con su periodo vacacional.
Antes Rubén Núñez Ginez, se deslindaba del pacto que algunos maestros firmaron con el líder del Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA), Andrés Manuel López Obrador y advertía que habrían sanciones para quienes incurrieron en la violación de los principios rectores de la gremial.
Desde ahí, el líder de los mentores señalaba que ninguno de los que conforman la dirigencia estatal fue llamado para concretar esta acción aunque no negó que haya existido una reunión anterior con López Obrador, pero no se trató ningún asunto relacionado a lo político.
Carina García/Libertad-Oaxaca.info