Entre reclamos, gritos y mantas, la Cámara de Diputados aprobó en lo general el Presupuesto de Egresos de la Federación 2022, en el que distribuye 7.88 billones de pesos para el próximo año.
El dictamen recibió 274 votos a favor, 219 en contra y 3 abstenciones; tras la votación, la Mesa Directiva decretó un receso y citó a los legisladores para este jueves a las 9:00 horas.
Para la discusión en lo particular, las bancadas presentarán 1,906 reservas, por lo que se prevé que la discusión dure al menos dos días.
Al fundamentar el dictamen a nombre de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública, el diputado morenista Erasmo González dijo que en el Presupuesto hay un incremento de 4.7% para el gasto federalizado para llegar a un máximo histórico de 2,108.9 mil millones de pesos.
Comentó que también hay aumentos a programas sociales, como la pensión para adultos mayores, la pensión para personas con discapacidad y acciones para ampliar el alcance de IMSS-Bienestar.
“Se ha establecido un aumento de más del 15% en términos reales respecto a lo aprobado para este ejercicio 2021. De tal forma se establecen mayores recursos para la adquisición de vacunas contra el Covid-19, para la atención a personal médico, la mejora de instituciones hospitalarias y mayor gratuidad en salud para personas no derechohabientes”, añadió.
Al presentar su posicionamiento, el perredista Luis Espinosa Cházaro señaló que la Secretaria de Hacienda adecuó el Presupuesto a “capricho de un hombre” y recordó que la coalición Va por México (PAN-PRI-PRD) presentó un Presupuesto alternativo en el que rescatan programad que desapareció la actual administración.
Entre pancartas alusivas a la coalición y la leyenda “Unidos para defender a México”, el priista Rubén Moreira exhortó a Morena a debatir con profundidad y a romper “el círculo pernicioso de la polarización del país”; además, pidió que a los estados se les aumenten sus recursos para atender problemas de seguridad pública.
“Se ha creado la falsa percepción que el dinero que se distribuye es generado por el gobierno federal; sin embargo, es la Federación quien vive del dinero de los estados y municipios, y a ellos se le regresan migajas”, comentó.
En su turno, el panista Jorge Romero dijo que el dictamen del Presupuesto de Egresos de la Federación no atiende las prioridades de los mexicanos, pues dijo que los recursos están asignados a programas estrella de López Obrador.
“Antes que una refinería, antes que un tren, no porque esté mal el tren, simplemente tenemos que reasignar dinero para un programa para empleos temporales, para un seguro del empleo y para apoyar a las micro, pequeñas y medianas empresas que son las que generan 80% de los empleos de este país”, dijo.
En su turno, el petista Benjamín Robles pidió a su partido, a Morena y al PVEM votar en contra de las propuesta de Va por México, pues mencionó que el PAN, PRI y PRD representan una “historia nefasta” y aseguró que son los partidos que han ido en contra de México.
“Se acabaron los moches, eso que tanto extrañan los legisladores de la derecha porque eran sus fuentes de corrupción; se acabaron los saqueadores del Presupuesto, esos que con la complacencia de los gobiernos neoliberales desviaban recursos; se acabaron los despilfarros por parte de las instituciones de gobierno y de organismos autónomos como el INE”, dijo el legislador.
Diputados de todas las bancadas presentarán 1,906 reservas, por lo que la discusión puede tardar más de dos días para aprobarse en lo particular.
Forbes
