“Hay personas que afirman que los recursos empleados para la Copa Mundial deberían haberse aplicado en salud y la educación; escucho y respeto esas opiniones, pero no estoy de acuerdo. Es un falso dilema”, dijo la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff en un mensaje de 10 minutos por radio y televisión, donde también atacó a los “pesimistas” que habían pronosticado que no había torneo de FIFA. En su mensaje aseguró que metieron recursos“212 veces mayor que la cantidad invertida en estadios”.
Defendió que las inversiones en estadios, una asociación entre los bancos públicos, gobiernos estatales y empresas privadas, representaron 8 billones de dólares mientras que para educación y la salud, los gobiernos federal, estatal y municipal invirtieron alrededor de 1.7 trillones de dólares. Su mensaje se da a dos días del Mundial y tras una encuesta de Datafolha donde se señala que 51% de personas están a favor del Mundial, mientras, en comparación con el 52% registrado en febrero y 48% de abril. Aunque esta cifra está por debajo del 79% de 2008 cuando el país fue elegido anfitrión de la FIFA.
“Hay que mirar las dos caras de la moneda. La Copa no es sólo el gasto; también trae ingresos para el país. Es un factor de desarrollo económico y social. Genera negocios, inyecta miles de millones de dólares en la economía, crea puestos de trabajo”, continuó Rousseff en un momento en que su popularidad cae en las encuestas. Advirtió que se castigará “con el máximo rigor” a quienes resulten responsables de la las acusaciones de corrupción, siempre y cuando se demuestre.
Indicó que Brasil cuenta con un sistema eléctrico sólido y las obras de estadios y aeropuertos realizados por el gobierno federal, además de presumir que cuentan con un sistema de seguridad “capaz de proteger a todo el mundo” y un “sistema moderno de comunicación y de transmisión”, por lo que descartó cualquier posibilidad de un apagón durante el evento mundialista. “También llegó a lo ridículo predecir una epidemia de dengue en la Copa, en pleno invierno, en Brasil!”, señaló en tono de burla.
En su mensaje, reafirmó que los aeropuertos no fueron construidos sólo para el Mundial si no para satisfacer la creciente demanda de brasileños que ahora viajan en avión. También dijo que los estadios, a su vez, sirven para otros propósitos además de los partidos; “como se suele decir en el lenguaje del futbol: juego es juego En el juego, a partir de ahora, los detractores que vienen van a perder, ya fueron derrotados por la capacidad de trabajo y la determinación del pueblo brasileño que nunca se rinde”.
SUMA APOYO DE PARTIDOS
Los partidos del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB) y Democrático Laborista (PDT) ratificaron hoy su apoyo a la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, como candidata a la reelección en los comicios del 5 de octubre próximo.
En ambos casos no fue más que una confirmación de un respaldo ya anunciado, aún más en el caso del PMDB, partido del vicepresidente, Michel Temer, quien volverá a postular para ese mismo cargo en la fórmula de Rousseff, candidata del Partido de los Trabajadores (PT).
La presidenta participó en las convenciones celebradas hoy en Brasilia por ambos partidos, que se han sumado a otras formaciones que ya se han decantado por apoyar su reelección. “Juntos somos invencibles. Separados somos débiles. Pero juntos tenemos la capacidad de seguir construyendo un Brasil cada vez más próspero”, declaró la mandataria en la convención del PDT, partido al que se afilió en 1979 y que abandonó en 1999, para enrolarse en las filas del PT.
En el PMDB, el principal partido de la coalición que sustenta al Gobierno del PT, hubo algunas disidencias que se manifestaron en la votación que decidió sobre el apoyo a la repetición de la fórmula Rousseff-Temer.
Agencias