Diana Méndez
Pobladores del paraje El Guayabal, en Tlalixtac de Cabrera, han denunciado una grave contaminación en la presa La Toma, ubicada en esta localidad. Según los habitantes, la fuente de la contaminación es un basurero establecido en los límites del municipio.
Los residentes han señalado que las autoridades municipales de Tlalixtac de Cabrera, en colaboración con las de San Andrés Huayapam, decidieron instalar una zona destinada a la disposición de residuos cerca de la presa.
Lo anterior, pese a que el Guayabal ha sido designado como una reserva protegida desde 1937 debido a su rica biodiversidad y su función como pulmón verde de la localidad. Por lo que la instalación del basurero en esta área está poniendo en riesgo el equilibrio ecológico de la zona y, en consecuencia, afecta a la presa La Toma.
Dijeron que teme que la contaminación pueda extenderse a otras presas cercanas, como La Azucena y El Estudiante, que son cruciales para el abastecimiento. Los pobladores han cuestionado la falta de transparencia en el proceso de autorización del basurero y sospechan que hay intereses particulares involucrados.
Por ello, exige la intervención urgente de las autoridades estatales y federales para resolver la situación y mitigar la situación. Además, los pobladores hacen un llamado a toda la población de Tlalixtac y a las comunidades cercanas para que se unan a la defensa del medio ambiente, destacando que la preservación de estos recursos naturales es de interés común.