¿QUIÉN PUEDE COMPETIR CON AMLO? ¿NARRO? ¿CORRAL? ¿NÚÑEZ?
Roy Campos, el Walter Mercado de las predicciones electorales, está feliz. Recién presentó los resultados de la encuesta sobre la elección presidencial del 2018 que le encargó a Consulta Mitofski el periódico El Economista.
Resulta una obviedad decir que Roy Campos destilaba optimismo, confiando en que esta vez no fallará en sus “profecías”, por dos razones, porque para nadie es un secreto que al día de hoy Andrés Manuel puntea por amplio margen y porque a cada rubro encuestado le incluyó la “ADVERTENCIA: Por favor nadie vea esto como un pronóstico, porque seguramente se equivocará”.
O sea, si algo sucede no es nuestra culpa –de la encuestadora- sino de aquellos que se la creyeron, así que por favor “aléguenle al ampáyer”; lo cual no es motivo para dejar de especular y cruzar apuestas en torno a la madre de todas las batallas electorales.
Pero vayamos a los datos duros, por partidos destacan varias premisas, A) Las zonas de influencias no se han alterado en términos globales B) En intención del voto a nivel nacional, el PRI (13%) ha sido desplazado por el PAN (18.8%) y por Morena (15.9%), aunque las tendencias reflejan que Morena va a la alza y el PAN a la baja C) El PRD cae a su peor nivel histórico 5.1%, lo cual explica el nerviosismo de Mancera y las oportunas renuncias de algunos “cuadros distinguidos”.
Lo interesante está en los cruces entre posibles candidatos. Se presentan nueve y todos puntea Andrés Manuel; veamos algunos, 1) Zavala 23.7%, AMLO 25.8%, Osorio 14.7%, Mancera 6.9%, Bronco 4.4%; 2) Anaya 19.8%, AMLO 27.1%, Osorio 15.1%, Mancera 6.8%, Bronco 5.3%; 3) Moreno Valle 19.1%, AMLO 2.6%, Osorio 16.3%, Mancera 6.2%, Bronco 3.7%; 4) Zavala 23.5%, AMLO 27.1%, Videgaray 12.8%, Mancera 6.6%, Bronco 3,4%; 5) Anaya 19.9%, AMLO 27.2%, Eruviel Ávila 13.3%, Mancera 7.4%, Bronco 4.4%.
Los demás andan en los mismos parámetros, no se presentan porcentajes de indecisos ni de quienes no respondieron; dado que las mediciones se presentan comparadas con julio y septiembre de 2016, se advierte que Andrés Manuel ha ido a la alza y los tres panistas –Zavala, Anaya y Moreno- a la baja; al igual que los priistas –Osorio, Ávila y Videgaray; Mancera y el Bronco ni suben ni bajan sino todo lo contrario, muy en su estilo.
De lo anterior, también con la advertencia de no verlo como una premonición, podemos concluir que al día de hoy la ventaja de AMLO da la impresión de ser definitiva; pero, como todo en política, puede cambiar en un instante, por ello es el juego de espejos más complejo de los conocidos, nadie en su sano juicio debe –o debería- echar las campanas al vuelo.
Algo sí es evidente. El PAN, PRI y PRD con los posibles candidatos que traen muy difícilmente podrán ya no digamos ganar sino empatar el marcador; otro factor puede ser, si crece y toma forma, la convocatoria del Ingeniero Cárdenas a construir una candidatura de amplio espectro.
Margarita Zavala, la mejor posicionada en el PAN, ya en una campaña de rompe y rasga no pasa la prueba de los negativos de su esposo; Anaya, el “Niño Fidencio” de la Mafia Azul, es un Harry Potter de pacotilla, soberbio, mentiroso y traidor, no se traiciona porque no se alcanza y Moreno Valle, pronto empezará a conocer de la resaca de sus desaseos, que no son pocos.
En el PRI, no pintan mejor las cosas, el ejercicio del poder o “de no poder” (versión Manlio Fabio) lo coloca en una compleja posición. Ninguno parece ser competitivo y no se ve que esto pueda cambiar; y en el PRD, Miguel Ángel Mancera da pena ajena, igual o mayor que la que provoca la ciudad que trae destrozada y en la inseguridad total.
En conclusión, en el corto plazo, PRI, PAN y PRD tienen que cambiar de jinetes y dar un golpe de timón. Un destacado analista me decía: Las alternativas son Javier Corral, José Narro y Arturo Núñez…
¿Alguien puede asegurar que esto ya está decidido?
RAÚL CASTELLANOS HERNÁNDEZ / @rcastellanosh
