“IMAGINA QUE NO HAY PARAÍSO, QUE NO HAY PAÍSES NADA POR LO QUE MATAR O MORIR” –John Lennon dixit-; “puedes decir que soy un soñador, pero no soy el único”; ya entrados en las nostalgias, de las buenas, no quiero dejar pasar una fecha emblématica, para quienes somos “beatleros” de corazón; Jonh Lennon nació en Liverpool un 9 de octubre de 1940 –hace una semana hubiera cumplido 76 años- en medio de un bombardeo aéreo alemán, cuentan las crónicas que la hermana de su madre utilizó los destellos de luz para auxiliar el parto; al lado de Paul McCartney formaron la banda “The Quarrymen” que llegaría con el tiempos a convertirse en “The Beatles”, en “The Cavern” el emblemático lugar donde se iniciaron, aun se conserva el pequeño colorido escenario –entre lúdico y surrealista- donde actuaban, para los beatlemaniacos, bajar los tres niveles de escaleras, tomarse una cerveza en la barra y escuchar un concierto –de los que se celebran casi a diario- es un obligado ritual que culmina el peregrinar desde cualquier parte del mundo cuando visitas Liverpool; cuando fue a la escuela le preguntaron que quería ser de grande, respondió, “feliz”, le dijeron que no entendía la pregunta y les contestó “ustedes no entienden la vida”; constructor de utopías, se definía “siempre fui un rebelde y no solo un músico, poeta, lunático”, irreverente por naturaleza, durante un concierto celebrado en 1963 en el Royal Variety al que asistió la realeza en pleno encabezada por la Reina Madre convocó a su público “para nuestra siguiente canción me gustaría pedirles su ayuda, los del gallinero pueden aplaudir y el resto de ustedes basta con que hagan sonar sus joyas”; amante del amor a su manera marcaba las contradicciones “vivimos en un mundo donde nos escondemos para hacer el amor mientras la violencia se practica a plena luz del día”, sostenía que “todo se ve más claro cuando estás enamorado” –en lo que estamos de acuerdo-, según sus críticos “Lucy in de sky with diamonds” –Lucy en el cielo con diamantes- es su más grande canción de amor, “un etéreo cuento de hadas en el que la búsqueda del amor es llevada a través de un paisaje surrealista de flores gigantescas, que da lugar a taxis hechos de periódicos, una estación de tren y una última mirada fugaz a la muchacha con ojos de caleidoscopio”; se revelaba contra “los que están dispuestos a cualquier cosa menos a vivir aquí y ahora” porque “la vida es lo que sucede mientras estás ocupado haciendo otros planes”; en diciembre de 1971 ya convertido en abanderado de la paz lanzó “Merry christmas war is over” –Feliz Navidad la Guerra ha Terminado- lo que motivó el enojo de Richard Nixon, al considerar –la canción- “propaganda pacifista contra la guerra de Vietnam”; el 8 de diciembre de 1980, alrededor de las 10:50 pm. al volver de cenar acompañado de Yoko Ono al edificio Dakota –en Nueva York- donde vivían, Mark David Chapman –a quien al salir le había autografiado el álbum Double Fantasy- le disparó cinco veces por la espalda, fue declarado muerto a las 11:20 pm; incinerado en el cementerio Ferncliff, sus cenizas esparcidas en el Central Park de Nueva York, donde tiempo después se construyó el monumento –en su recuerdo- “Strawberry Fields” en el que cada año se encienden cientos, miles de velas como en todo el mundo; al despedirlo Ono expresó “John amaba y rezaba por la raza humana, por favor recen por lo mismo”; Lennon, el idealista soñador hoy más presente que nunca llamó a “darle una oportunidad a la paz”, imaginó “puedes decir que soy un soñador pero no soy el único, espero que algún día te nos unas y el mundo vivirá como uno solo”…¿alguien puede asegurar que esto ya está decidido?….
RAÚL CASTELLANOS / @rcperseguido