José Antonio Acosta Hernández, “El Diego”, presunto líder de sicarios de “La Línea”, declaró ante la Policía Federal que 16 de los 17 muertos el 25 de julio pasado en el penal de Ciudad Juárez, Chihuahua, eran miembros del cártel de Sinaloa, que, según él, protagonizaron una riña entre ellos.
En la tercera parte de una entrevista difundida por la Secretaría de Seguridad Pública federal, manifestó que su grupo apoyaba a los integrantes del cártel de Juárez recluidos en el Cereso municipal enviándoles armas con el apoyo de los custodios.
También señaló que se ordenó la ejecución de al menos seis policías que apoyaban sus enemigos del cártel de Sinaloa, además de que él colocó una manta con amenazas contra agentes de la DEA.
– De los eventos que ocurrieron dentro del penal municipal, intentos de motín, riñas, todo esto ¿cómo se controlaba por ustedes desde afuera?
– Pues a veces mandándoles equipo, mandándoles armas, por ejemplo este último motín, fue… ahí no afectó nada a los compañeros que están ahí recluidos (cártel de Juárez), ese fue un motín solo entre ellos mismos, entre la gente del Cártel de Sinaloa y que pues los 16 muertos son de ellos, ellos mismos se mataron entre sí. Solo una persona, la del sexo femenino, es la que sí era gente de nosotros.
-¿Cómo le hacían para hacer llegar las armas adentro, con quién estaban coludidos o quién les ayudaba?
-Pues a veces por medio de custodios que son los que ayudan a meter las armas.
-¿Cuántas armas llegaban a meter o a mandar?
– Pues a veces se metían de una o dos, porque no, no se puede meter mucho.
-¡Cada cuánto?
-No, pues eso tiene que ser más o menos cada quince días, si no, no es muy frecuente, porque no se puede.
Milenio