Más de 100 personas resultaron hoy heridas, la mayoría policías, y decenas fueron detenidas en enfrentamientos entre las fuerzas del orden y manifestantes que querían impedir la primera marcha del Orgullo Gay en Belgrado, la capital de Serbia.
El Ministerio serbio del Interior precisó que 180 personas fueron detenidas, de las cuales 75 permanecerán en custodia, y advirtió que los arrestos proseguirán durante la noche y en los días siguientes.
Antes de que empezara la marcha, grupos de jóvenes opuestos al desfile lanzaron piedras, bengalas, botellas con gasolina y ladrillos contra la policía desplegada en distintos puntos de acceso al recorrido, reportó la agencia serbia de noticias Tanjug.
En la céntrica plaza de Slavija, la policía tuvo que utilizar gas lacrimógeno para dispersar a unos 150 “ultras homófobos”, quienes más tarde se desplazaron a otro lugar cercano donde destruyeron un vehículo policial y rompieron los cristales de tres autobuses.
En otras zonas del centro de Belgrado, grupos de extremistas rompieron varios contenedores, atacaron automóviles e incendiaron el edificio que alberga la sede del Partido Democrático (DS), que gobierna en Serbia.
Los homófobos atacaron también la sede del Partido Socialista de Serbia (SPS), de la coalición gobernante y liderada por el ministro del Interior, Ivica Dacic.
Mientras el desfile del Orgullo Gay avanzaba por las calles y avenidas de la capital serbia, cientos de manifestantes empezaron a corear estribillos y trataron de acercarse a los participantes para agredirlos.
Este fue el primer desfile de Orgullo Gay en Serbia desde una marcha en 2001 que terminó en violentos enfrentamientos provocados por manifestantes de extrema derecha y pandillas de jóvenes violentos.
El año pasado una marcha de Orgullo Gay fue cancelada debido a la amenaza de grupos nacionalistas radicales y a la falta de coordinación entre las instituciones estatales y los organizadores de la manifestación.
Grupos de derecha dicen que la homosexualidad está en contra de los valores morales de la familia serbia y contra su religión, mientras la Iglesia Ortodoxa Serbia condenó la marcha pero también advirtió contra la violencia hacia los participantes.
Jelana Trivan, portavoz del Partido Democrático, señaló que la violencia no tiene nada que ver con los valores morales. “Estas son pandillas de vándalos que deben ser castigados con severidad”, dijo.
Antes de la marcha, Vincent Degert, jefe de la misión de la Unión Europea (UE) en Serbia, habló ante unos mil activistas gay y partidarios de éstos, reunidos en un parque en el centro de Belgrado y rodeados por policías y vehículos blindados.
“Estamos aquí para celebrar los valores de la tolerancia, la libertad de expresión y de reunión”, dijo Degert a la multitud.
La violencia se produjo dos días antes de la visita de la secretaria estadunidense de Estado, Hillary Clinton, a Serbia para reiterar el apoyo de Washington a las aspiraciones de Belgrado a unirse a la Unión Europea, según Tanjug.