El secretario de educación pública, Alonso Lujambio, defendió a la comida chatarra negando su existencia y alegando que no hay comida chatarra sino que más bien no hay dietas balanceadas.
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De acuerdo con El Universal, Lujambio negó además que hubiera presiones para que se diera marcha atrás a la salida de la comida chatarra de las escuelas, alegando que sí saldrán “algunos productos” de las escuelas.
Dijo además que las empresas que producen comida chatarra podrían hacer ajustes a los productos para que puedan regresar a las escuelas.
Admitió, no obstante, que hubo pláticas con representantes de los sectores como los de la leche, galletas y botanas, por lo cual quedaron claras las técnicas y las características del proceso que realizan, por lo cual se hicieron ajustes para minimizar costos y maximizar los beneficios de la política de las escuelas públicas.
Cabe señalar que en Estados Unidos se prohibieron en algunas escuelas y universidades las bebidas chatarra. En México, la SEP reculó del plan original para sacarlas, junto con las frituras, de escuelas públicas.