El déficit financiero que enfrenta la UABJO se debe al crecimiento de la matrícula escolar y de la población de trabajadores académicos y administrativos, así como a los procesos de calidad que viven cada una de las Unidades Académicas, afirma el secretario Administrativo de la institución, Dr. Taurino Amílcar Sosa Velasco.
El también catedrático universitario refiere que la Universidad Autónoma “Benito Juárez” de Oaxaca absorbe más del 50 por ciento de la matrícula de educación superior en la entidad, y lamenta que este hecho no sea considerado por los gobiernos federal y estatal, ya que el incremento al presupuesto ha sido del 2 al 3 por ciento, en promedio, durante los últimos años.
Señala las diversas necesidades que enfrenta la institución educativa más grande e importante de Oaxaca, especialmente los incrementos salariales de más de 4 mil trabajadores de seis sindicatos –reconocidos por la autoridad laboral gubernamental– en las revisiones contractuales de cada año, lo que aumenta el déficit económico que vive el Alma Mater.
Por ello, para implementar de manera integral toda una estrategia que permita a las y los universitarios atender los problemas estructurales de la Máxima Casa de Estudios, Sosa Velasco propone “cerrar filas en torno a la Administración Central que preside el rector, Dr. Eduardo Bautista Martínez”.
Doctor en Ciencias Odontológicas por la Universidad de Granada, España, y especialista en Odontopediatría, el Secretario Administrativo refiere en entrevista que “tenemos una Ley Orgánica que ha quedado desfasada de las necesidades de la institución y un sistema electoral que nos ha traído diversos problemas para salvar los compromisos internos”.
Indica que un punto importante en la desigualdad que enfrenta la UABJO con respecto a otras instituciones de educación superior es el presupuesto por alumno, que durante los últimos 12 años ha sido muy raquítico y a la fecha se ubica en el último lugar de la escala de las universidades públicas estatales con apenas 40 mil 640.40 pesos por estudiante.
Con base en un estudio sobre “Capacidad de atención de la UABJO 2014-2020”, detalla que en 2004 el presupuesto por alumno era de 11 mil 502 pesos, para el 2006 pasó a 15 mil 319, en 2010 a 28 mil 197 pesos, en 2012 a 43 mil 608 pesos, pero en 2015 bajó a 35 mil 277 pesos y hasta el año pasado, 2017, apenas rebasaba los 40 mil pesos.
Esta situación nos deja en desequilibrio y en estado de indefensión para poder solventar los problemas laborales y el crecimiento de la matrícula, sostiene enfático el funcionario de la Administración Central y aclara que a pesar de ello la Universidad ha hecho su papel en materia educativa.
“Hoy podemos presumir que el 83 por ciento de la matrícula se encuentra en programas de calidad, lo que quiere decir que hemos sido supervisados y calificados por los pares a nivel nacional”, subraya.
Agrega que las y los universitarios han entendido el problema que vivimos y trabajan en la atención de planteamientos continuos como el de la Secretaría de Educación Pública (SEP), que a través de la Subsecretaría de Educación Superior insiste a cada momento en obtener resultados.
Recuerda que en la UABJO se creó un Comité de Saneamiento, conformado por integrantes de la Administración Central, que han implementado las estrategias necesarias para sanear las finanzas y clarificar el estado en que se encuentra la Máxima Casa de Estudios.
Instalado en su oficina del edificio de Rectoría, el Cirujano Dentista especialista en Odontopediatría, acepta también la necesidad de “hacer una revisión de los puntos donde se haya fallado o no se hubiere administrado de manera adecuada para que de ahora en adelante eso cambie”.