El desenlace que tuvo el enfrentamiento entre la Policía Federal Preventiva y el magisterio oaxaqueño, obliga al Gobernador del Estado, Gabino Cué Monteagudo, a tomar decisiones más que jurídicas, de índole político y a restablecer el diálogo con los sectores del movimiento social, indicó el Subsecretario de Asuntos Indígenas, Zenén Bravo Castellanos.
Aunque el funcionario se limitó a dar opiniones acerca de éste enfrentamiento, determinó que es escaso el tiempo que el gobierno estatal lleva en el poder, sin embargo debería estar determinando algunas acciones para ejercer justicia que el pueblo reclama, como en el caso del movimiento político social del año 2006.
Indicó que el gobierno estatal debe hacer un análisis de algunos sucesos ocurridos el martes y de los errores cometidos por falta de operación política y de acuerdos previos a los hechos. Asimismo, analizar los errores que se dieron ya en el campo de batalla.
Dijo que esa situación son cosas de las cuales se debe sacar un balance y si hubo incapacidad de algunas personas que no correspondieron a sus funciones, el mandatario estatal debe valorarlo con toda seriedad, esto ante la exigencia de la Sección 22 de la destitución de Irma Piñeyro, Secretaria General de Gobierno y de Bernardo Vásquez Colmenares, titular del IEEPO.
Por otra parte, al pedir su opinión entre el gobierno de Gabino Cué y del ex mandatario Ulises Ruiz, Bravo Castellanos señaló que en su momento, quienes integraron el movimiento social del 2006, magisterio-APPO, apostaron a derrotar al Partido Revolucionario Institucional (PRI), ya que sólo había dos opciones, el proceso electoral o por la vía armada. Sin embargo, dijo, que como integrante de ese movimiento, apoyaron la candidatura de Gabino Cué para que hubiera cambios sustanciales.
Señaló que para un sector de la población aún no hay hechos que convenzan de éste cambio y esto es parte de la rivalidad que prevalece en Oaxaca.
Dijo que algunos reclamos que existen en la población es que no existe o se carece de acciones para castigar a los responsables del 2006 y el despilfarro de recursos que dejó Ulises Ruiz.
Agencia JM
