El gobierno de Gabino Cué fue doblegado por el Sindicato de Trabajadores al Servicio de los Tres Poderes del Estado, luego que de que anunció esta madrugada la separación temporal del Comisionado de la Policía Estatal César Alfaro Cruz y del Oficial Mayor de la Secretaría de Seguridad Pública Roberto Morales, quienes serán sujetos a investigación por cometer presunta represión contra el gremio, junto con un Comandante de la Policía Estatal Preventiva.
El mandatario había solicitado disculpas a los burócratas tras conocer el video que le fue presentado tras el intento de desalojo de las oficinas de la Secretaría de Seguridad Pública y Cuartel de la Policía Estatal ocurridos el lunes y que detonó el conflicto y causó que los inconformes decretaran un paro de labores que mantuvo paralizadas al menos 79 dependencias públicas durante 56 horas.
Los inconformes le exigieron la renuncia inmediata del Secretario de Seguridad Pública Marco Tulio López Escamilla y del propio Comisionado de la Policía Estatal,
Cué admitió que el cese temporal de los mandos fue otorgado como un gesto de institucionalidad de los propios mandos policíacos para contribuir a la distensión del conflicto.
Sin embargo el Comisionado de la Policía Estatal, Roberto César Alfaro Cruz, y el Oficial Mayor serán sujetos a proceso de investigaciones sobre el incidente ocurrido el pasado lunes 20 de febrero, en las instalaciones del Cuartel de la Policía, cuando los burócratas demandaban un estacionamiento exclusivo, plazas, un puente peatonal y diversas plazas.
El líder de los burócratas Juan Rosas, admitió que la negociación alcanzada con el mandatario aliancista fue limpia y transparente, “se demandó lo justo, porque se comprobó que los trabajadores jamás fueron a golpear policías, sin embargo fueron reprimidos con un exceso de fuerza pública”.
El dirigente anunció que este jueves los inconformes reanudaron sus actividades de manera normal, comprometiendo a ejercer un mejor trabajo por el bienestar de la entidad.
Milenio