Coronavirus genera crisis en la iglesia al disminuir las limosnas y donativos. Bodas, bautizos, misas o servicios pagados y en general todas las ceremonias religiosas que tenían un alto costo y están suspendidas por la pandemia, limitando la asistencia de creyentes a un año del cierre de templos, operando en el mejor de los casos al 25 por ciento, la iglesia católica dominante en Latinoamérica atraviesa en Oaxaca una de las peores crisis, con mas de media docena de presbíteros fallecidos y con una brusca caída en las limosnas e ingresos por ceremonias religiosas de casi el 90 por ciento, situación económica que lamentan los sacerdotes, porque desde la promulgación de las Leyes de Reforma, cuando Benito Juárez, ilustre oaxaqueño, separó a la Iglesia del estado y se expropiaron sus bienes e inmensa riqueza, la iglesia católica no habían sufrido una crisis similar hasta ahora, que no es únicamente crisis económica, sino también de sumisión, credibilidad y fe.
Cuando se vive en relativa normalidad, costumbres y no hay oportunidad de reflexionar o recapacitar respecto de lo que consideramos habitual y cotidiano, pocas o nulas son las ocasiones para el análisis, como ha sucedido desde que inicio hace un año el cierre de lugares de concentración publica, como las iglesias o templos, lugares de culto y devoción que para los creyentes son de salvación, protección y esperanza, donde por medio de limosnas, oraciones o rezos podían conseguir lo que pedían a Dios operando por medio de milagros lo que se pretendía, hasta que la pandemia vino a trastocar esta creencia, obviamente quienes tienen escepticismo o duda, porque quienes tienen fe o certeza y no razón o lógica, las circunstancias siguen igual, no obstante los rituales, oraciones y fe no hayan servido para nada contra el covid, y si lo hayan hecho contundentemente los resultados de la ciencia biomédica que llevó a la invención de la vacuna, próxima salvación de millones de personas y al final extinción de la pandemia, porque como demostración de la crisis de credibilidad de rituales religiosos, todos los sacerdotes y hasta el mismo papa han buscado ser vacunados, porque ni su agua bendita o rituales saben no sirven contra el virus del covid, de tal forma que como sucede en países nórdicos de Europa y en general en las naciones con alto grado de educación, las religiones que sean luego de no superar crisis de credibilidad respecto de sus dogmas, sus templos se han transformado en bibliotecas, teatros o salas de concierto, porque en el siglo XXI los avances y resultados de la ciencia han demostrado inobjetablemente que ante las enfermedades, problemas, retos o necesidades, la mejor herramienta que tenemos para solucionarlos es la ciencia, su método y filosofía, porque si bien la fe y creencias religiosas pueden funcionar como placebo o ilusión, lo cierto es que frente a la pandemia del covid, la solución está en la ciencia, poniendo en crisis a la iglesia, trance no solo económico, sino también de credibilidad y fe.
